Bogotá siempre ha sido la ciudad de todos, pero paradójicamente a ratos parece la ciudad de nadie. Hay quienes no tienen problema en arrojar la basura fuera de las canecas, en cualquier lugar y sin tener en cuenta el daño que eso genera para todos; no obstante hay otros que sí se preocupan y se interesan en mantener la ciudad limpia y organizada, labor que tampoco se facilita si no se cuenta con el mobiliario urbano que requieren los ciudadanos.
Hasta hace un par de meses la ciudad contaba con aproximadamente 6.000 canecas, pero a partir del 11 de marzo -y hasta el día de hoy- se han instalado más de 8.500 nuevas canecas que hacen parte del esquema de aseo de la capital, con el que se alcanzará un total de 80.000 canecas en las 20 localidades incluyendo Sumapaz.
Para una inversión total de $45.000 millones de pesos las canecas fabricadas en acero inoxidable y polietileno inyectado esperan lograr que los ciudadanos depositen los desechos adecuadamente, entre otras ya que éstas tienen como novedad la separación de residuos aprovechables con bolsa blanca (Papel, metal, cartón, textiles, vidrio, chatarra, pet, tetrapack) y no aprovechables con bolsa negra. Otra novedad es que incluyen una tapa para evitar los residuos voluminosos y proteger los desechos de la lluvia. También cuentan con relieve para apagar las colillas de cigarrillos.
Con esto se espera alcanzar la cifra de 1 caneca por cada 90 habitantes, cifra superior a la de ciudades como Nueva York (un contenedor por cada 318 habitantes) y Sao Paulo (uno por cada 92 habitantes). Y la distribución será de una caneca cada 50 metros en los barrios, y una cada 15 metros en las vías principales.
OPINIONES
A raíz de todo esto surgen muchas opiniones. Varias coinciden en que lo primordial es la educación y la cultura ciudadana, ya que se ha denunciado que en zonas como La Primavera en Puente Aranda o en la Av. Caracas con Cll. 76, entre otras, se están destruyendo las recién instaladas canecas, y en muchos casos se roban las tapas.
La conclusión es clara: el llamado es tanto para la administración distrital como para los ciudadanos, No sirven de mucho tantas canecas por toda la ciudad si apenas un cuarto de los ciudadanos, o menos, saben usarlas adecuadamente. Falta información clara que permita educar a la gente y disipar sus dudas. Por otra parte, como ciudadanos debemos cuidarlas pues hacen parte de nuestro mobiliario y nos ayudarán a mantener limpia nuestra ciudad.
Algo más:
Parece arbitraria la ubicación de las canecas. El distrito debe ponerlas estratégicamente teniendo en cuenta el tránsito de peatones y las zonas donde se ubican, no improvisadamente como lo están haciendo en algunos sectores.
Exijamos al gobierno local más educación en temas cultura ciudadana, pero mientras tanto no esperemos más, eduquémonos entre nosotros, expliquémosle al vecino, al abuelo, a la tía, a la novia, y a todo aquel que transite por Bogotá. Así también contribuimos a tener una ciudad más limpia y habitable.
Finalmente, recuerden denunciar el mal uso de estas canecas al 123, pues cada par de ellas nos cuesta a los ciudadanos de la capital $1.839.000.
*****
En esta galería encontrarán algunas de las opiniones que llegaron a mi cuenta de Instagram (@wilmar_perdomo) sobre el tema de las canecas:
Las están dañando vándalos se están robando las tapas no hay autoridades que ayuden a proteger
Califica: