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No se trata de destruir al técnico ni a los muchachos, ni más faltaba. Tampoco de decir ´te lo dije´ o de ser profetas del pasado, pero la derrota de Colombia ayer ante Uruguay nos deja muchas dudas, y para usar una frase de cajón, es crónica de una derrota anunciada.

Es un hecho que Pékerman se equivocó, tanto en el planteamiento como en los cambios, (más que en los cambios, en el momento y en la posición en la que los envió a la cancha). Y también es claro que muchos de los jugadores tampoco le respondieron.

Iniciemos haciendo la evaluación de forma individual.

David Ospina, que casi nunca falla, falló, y es el responsable del tercer gol pues la pelota entra por su palo.

Murillo, que también casi nunca falla, también falló, y es culpable en ese mismo gol, porque es superado por el delantero uruguayo de forma increíble. Ya él, (Murillo), había tenido una serie de desaciertos, en uno de ellos le sacaron amarilla.

Fabra, también es culpable en ese gol, porque estuvo muy mal en la marca, en esa jugada, y en casi todas las jugadas. Además, nunca salió bien al ataque.

Zapata esta vez no estuvo tan seguro, y Arias, muy mal en marca, y peor en la salida, es responsable, junto con Zapata, del segundo gol de Uruguay.

Sánchez es capítulo aparte, siempre juega bien, y esta vez también respondió, aunque casi nos cuesta un gol una desatención suya en el área.

Guarín definitivamente no pudo con la capitanía, con la marca y mucho menos con el ataque, ahora bien, su remate de media distancia nunca funcionó, todos sus disparos fueron desviados e imprecisos.

Cardona no le dio salida al equipo, no tuvo el pase corto ni largo y tampoco fue un apoyo en la recuperación.

Cuadrado está bajo de nivel, en el primer tiempo le costó estar en la otra punta y además se hizo sacar una roja irresponsable por un codazo en el final del partido lo que no le permite jugar contra Chile. Teófilo esta vez no fue el socio de todos y Bacca no tuvo opciones de gol porque sencillamente el balón no le llegó.

Macnelly no puso un solo pase preciso entre líneas, (para eso lo metieron en lugar de Guarín), Castillo no mostro su fútbol porque no pudo desbordar y también se hizo sacar una amarilla tonta en mitad de cancha. A Falcao tampoco le llegó la pelota.

En la parte táctica Pékerman se equivoca al repetir la formación que fue inicialista contra Perú. Macnelly debió jugar desde el principio y más cerca de los delanteros, no cerca de Sánchez, a donde lo metió después. Cuéllar debió estar en el medio campo pero el técnico lo envió a la tribuna. Jackson tuvo que jugar y desde el comienzo del partido, por su altura, su fuerza para luchar con los centrales y porque conoce a Godín, pues es compañero suyo en el Atlético de Madrid, y lo podría referenciar y bloquear bien. Ese gol del uruguayo es absolutamente absurdo porque todos en el mundo conocemos los goles de cabeza que marca y cabeceó entre tres jugadores de Colombia.

Cuando Pékerman hace los cambios, muy tarde para nosotros, porque no debió aguantar a Guarín tanto, primero que todo pone a Macnelly a jugar muy atrás, separado de los delanteros y casi en función de marca. Aunque todos pedimos a Castillo en un momento dado, ese juego no era para él al ir perdiendo, porque Uruguay se tiró para atrás y él no tenía espacios para su desborde y velocidad. Su juego es más efectivo cuando Colombia contragolpea, y Falcao no podía hacer nada si no había un lanzador de pelota que pusiera a los delanteros mano a mano, podría jugar Cristiano Ronaldo y nunca Colombia hubiera hecho gol.

Pékerman se equivoca en la nómina y en el planteamiento, porque deja que Uruguay le gane el medio campo y las bandas. No lo presiona en su propia cancha, no le pone el balón al piso y no hay alguien que surta de balones a los delanteros. En algunos pasajes juega al pelotazo, lo cual es absurdo para enfrentar a los uruguayos, quienes son los reyes del balón aéreo, en ataque y en defensa, y además Colombia no produce volumen de juego, por la selección de los jugadores, y porque cuando hace los cambios no ubica bien a Macnelly. En conclusión, Pékerman no pone ni mueve bien sus fichas.

Hay otros factores que no permiten que Colombia juegue bien. Muchos jugadores no están en buen nivel para la Selección, como Cuadrado y Guarín, (aunque extrañamente juegan bien en Italia), a otros jamás les llega el balón, como a Bacca, Castillo o Falcao. Otros han perdido su capacidad para asociarse, como Teófilo. Hay posiciones donde no hemos podido encontrar la clave como la de los laterales, Arias no estuvo bien, y Fabra tiene problemas de marca, igual que cuando jugaba Zúñiga y Armero, respectivamente.

Sánchez no tuvo un verdadero socio en marca y Cardona tenía que estar más cerca de los delanteros.

Colombia nunca supo defenderse con el balón, nunca hizo posesión, ni tuvo variantes, fue predecible y fue superado, le faltó jerarquía y calma.

Para los partidos en noviembre contra Chile y Argentina respectivamente tal vez regrese James, quien le hizo mucha falta a la Selección, pero a quien no podemos ver como el salvador y el Superman de Colombia. El equipo debe parecer eso, un equipo, y no puede depender de un solo jugador, y es donde Pékerman debe demostrar su talento, porque no podemos caer en ese cuento que cuando gana la Selección es la mano del técnico pero cuando se pierde son los jugadores.

Queda un mes para organizar, para aprender de los errores, para replantear y tomar decisiones, para probar otros jugadores y para recuperar el grupo física y mentalmente.

Seguimos por siempre creyendo y apoyando nuestra Selección, pero no por eso vamos a ocultar sus errores, por el contrario, los hacemos visibles para que no se repitan. Aún falta mucho camino, y como consuelo podemos decir que perdimos de visitantes y ganamos de locales, que mientras hagamos respetar nuestra ´localía´ en Barranquilla, tenemos un ochenta por ciento de la clasificación asegurada, y solo debemos arañar unos puntos de visitante contra Perú, Paraguay, Bolivia y Venezuela, rivales directos. También podemos decir que en las eliminatorias pasadas perdimos con Uruguay en Montevideo y sin embargo clasificamos.

¡Vamos mi Selección!

giovanniagudelomancera

periodista

Tarjeta Profesional #8356 Expedida por el Ministerio de Educación Nacional

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