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Este artículo lo publicamos el 10 de febrero de 2014 y aún cobra vigencia, mejor dicho, siempre es actual, más aún en esta semana, víspera de elecciones, porque a la pregunta redundante ¿Alguna vez lo han encuestado para una encuesta? el 99% respondió ¡NUNCA! y el 1% restante respondió ¡JAMAS!……

Esos son los resultados de la encuesta que hice a 100 personas cercanas, entre familiares, parientes cercanos y lejanos, vecinos del edificio, vecinos del barrio, amigos, amigos de mis amigos, amigos de los amigos de mis amigos, familia del novio de mi hija, familia de la novias de mis hijos, transeúntes prevenidos y desprevenidos, cobradores de fin de semana, (mejor llamados ´culebras´), conductores de carros piratas que nos sacan a la estación de Transmilenio, conductores de ´tricitaxis´ que hacen lo mismo, (pero más rápido y más barato, aunque más peligroso también), personal de seguridad del edificio, vigilante nocturno del barrio en bicicleta, (que no tiene ni un corta uñas para defenderse, solo un pito que casi se lo hacen tragar unos ´apartamenteros´ la otra noche), excompañeros de trabajo, (que a diferencia mía todavía tienen trabajo), enemigos, detractores y desconocidos en general.

La encuesta se hizo mediante la modalidad de pregunta directa e indirecta, llamada paga, llamada perdida, llamada por cobrar, llamada desde fijo, llamada desde celular, llamada desde radioteléfono, llamada desde cabinas, mensaje de texto, WhatsApp, Line, correo electrónico, Facebook, Linkedin, Twitter, Google+, pregunta por carta enviada por Servientrega, pregunta por carta enviada por DOMESA, fax, fotocopias del cuestionario repartidas puerta a puerta, y en algunos casos por debajo de la puerta, (o por la ventana), pregunta por Alfabeto Morse y pregunta gritando por la ventana, mandando razones y fastidiando.

El personal que participó en la encuesta fui yo, (el burro primero), y otro amigo desempleado que vende ollas inteligentes en el barrio pero que solo se las compran en el norte, (entonces no sé para qué las ofrece por acá), bueno, lo importante es que me ayudó, aunque tuve que pagarle con unas frías en la tienda de Lucho, (como decía mi abuelita María ´me salió más caro el caldo que los huevos´).

¿Por qué la hice? Porque jamás me han encuestado para nada y tenía la sensación que a mucha gente le pasa lo mismo. No sé de dónde sacan esas muestras para rating de radio y televisión, para intención de voto, para favorabilidad, para imagen negativa, para reelección, para revocatoria, para desempleo, para el DANE, o para cuanta cosa se inventan.

En este país le hacen encuesta a las encuestas pero no sabemos, y perdón la redundancia, a quién encuestan.

Hablemos de rating en televisión, la única llamada que me hacen cuando estoy viendo el partido del Real Madrid o de Santa Fe, es la de UNE o Movistar avisándome que en 20 días se me vence la factura, y el ringtone de navidad, (lo tengo durante todo el año), suena justo cuando Cristiano Ronaldo va a cobrar un penalti faltando un minuto y perdiendo uno a cero, o cuando Wilson Morelo, de Santa Fe, va a hacer lo mismo en igual situación.

Nunca me han abordado de ninguna forma, ni a mí ni a mis encuestados, para preguntarnos qué programa estamos viendo ni en qué canal ´privado´ nacional. Conmigo, como dice el refrán, ´quedarían con los crespos hechos´ porque solo veo televisión extranjera y por cable, (bueno, a no ser que sea un partido de la liga colombiana o de la Selección Colombia, porque obligada y desafortunadamente, me toca por uno de estos canales, o por Win).

Nunca me han abordado de ninguna forma, ni a mí ni a mis encuestados, para preguntarnos qué emisora estamos escuchando. En mi caso, desde las 3 de la mañana sintonizo ´la W´ hasta la una de la tarde, y luego paso a la básica de Caracol para el ´Pulso del Fútbol´, lo apago durante ´La Ventana´, (no soporto su conductor ni las canciones de Marín), prendo nuevamente a las cinco para ´Félix Regreso´ en ´la W´, y cuando termina este programa, apago para pasarme a ver televisión por cable hasta las dos de la mañana, cuando vuelvo a ´la W´. Como ven ¡nunca duermo!

¿A qué hora entonces veo televisión colombiana? ¡NUNCA!

Nunca me han abordado de ninguna forma, ni a mí ni a mis encuestados, para preguntarnos por quién vamos a votar ni a qué horas. Por mi parte votaré en ¡BLANCO!, e iré solo, a las 8 de la mañana, al puesto de votación improvisado en el colegio distrital del barrio donde estudia mi hijo. (Si espero a mi esposa y a mi suegra llegaremos faltando cinco para el cierre, así como llegan a misa a la mitad del evangelio).

Volviendo al tema del rating en televisión, cómo hacen estos genios de las encuestas para saber al otro día ¿qué si y qué no vieron los colombianos en los canales privados nacionales? Hay gente que cree que dentro de nuestro tv hay un aparatico que detecta que hacemos con el control remoto, qué programas vemos y cuáles no, y que envía secretamente la información a los encuestadores. Otros aseguran que hay un espía pago en nuestra casa escondido en el armario, y que cuando nos descuidamos, llama a estos canales desde el celular, para contar en cuál estamos sintonizados. Y peor aún, algunos aseguran que hay una cámara web escondida en nuestra sala y conectada con el Duopolio, (RCNTV y Caracol TV), la cual nos vigila, y nos delata, para que ellos sepan que programa estamos viendo.

En cuanto a las encuestas para intención de voto, (si es que existen), nunca incluyen en los famosos cuestionarios ¿qué tamal le gusta? o ¿qué ladrillo o teja prefiere? Tampoco preguntan ¿quién de esos políticos le va a dar beca para estudiar o trabajo en una de las entidades oficiales?, por nombramiento eso sí.

Nunca indagan en esas encuestas, (si es que existen), ¿qué va a hacer en el día libre obligatorio que le dan por votar? o ¿cuántos cupos le ofrecieron para estudiar en el Sena?

Y mucho menos incluyen en las preguntas ¿dónde le ofrecieron lote con servicios? o ¿si le prometieron pensionarlo más rápido y con el triple de su sueldo?

Y para qué hablamos de los resultados de esas encuestas. Nunca son los mismos. En una gana el uno, en otra gana el otro. Jamás gana el mismo. Al igual que los premios a la ´farsándula criolla´, (como decíamos con Rebollito y Carlos Giraldo en Sweet), o al periodismo colombiano, las encuestas son repartidas, no se sabe a quién le preguntan, pero todos terminan ganando, nadie sale perdedor.

Así que amigos lectores, si alguna vez son abordados por un encuestador, no importa dónde ni de qué forma, no duden en avisarme y por favor le dan los datos de mi blog para que ¡me pregunte a mí!

giovanniagudelomancera

periodista

Tarjeta Profesional #8356 Expedida por el Ministerio de Educación Nacional

síganos en twitter @giovanniagudelo

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