¡Seguimos encontrando gas!

Si nos detenemos a ver la línea del tiempo del año 2022, se han descubierto una gran cantidad de yacimientos tanto de gas como de petróleo que han marcado un hito en la historia de la industria.

Esto es una buena noticia, gústele a quien le guste y duela a quien le duela.

“Si llegara el caso en que nuestras reservas no fueran suficientes para nuestro autoabastecimiento, necesitamos soluciones, que podrían ser conectarse con otros países”.

No lo sé, pero esa frase todavía no la veo del todo necesaria.

Por ejemplo veámonos los hechos claros y las fechas cúspide de este año en materia de nuevos descubrimientos:

1. 29 de julio Ecopetrol y Petrobras
2. 10 de agosto Ecopetrol y la Shell (Gorgón 2)
3. 6 de octubre Hocol (Coralino 1)
4. 15 de octubre Parex (Casanare y Arauca)
5. 21 de octubre NG Energy (Brujo 1X en Córdoba)

NG Energy International, la empresa canadiense, recientemente anunció un nuevo hallazgo de gas en el bloque Sinú – 9 en la cuenca inferior del Valle del Magdalena a más de 8000 pies de profundidad. Esta noticia ya hace parte del segundo descubrimiento en el Departamento de Córdoba, teniendo en cuenta que el año pasado se invirtieron cerca de 112 millones de dólares en dicha zona para la explotación de gas.

Lo anterior, aumentando de manera significativa las reservas de gas natural en el país, las cuales para finales del 2021 alcanzaron los 8 años aproximadamente de duración hacia el futuro.

Recordemos que el gas natural es una energía fósil extraída del subsuelo que se distribuye a través de gasoductos de forma segura para que sea utilizado por los hogares, comercios e industrias a nivel nacional (Vanti).

Este energético puede estar ubicado bajo la superficie del suelo y asimismo en el fondo del mar, tal y como lo hemos visto con los descubrimientos recientes de Ecopetrol en el Caribe.

Cuando en el 2021 se hablaba sobre el panorama nacional de la producción de gas, hubo declaraciones como las de la ANH en la Conferencia de Enercol, donde se cuestionaba la producción ya que no se habían sumado nuevas reservas teniendo en cuenta la incertidumbre con la conexión al sistema de transporte nacional.

No obstante el panorama este año es diferente y ha habido una notoria creciente en las reservas tanto de gas como de petróleo que significan el poder mantener la autosuficiencia y la soberanía energética hacia el abastecimiento de miles de familias y sectores industriales del país.

Asimismo, Promigas reveló en su más reciente informe que el país presenta un gran potencial de aumentar sus reservas para los próximos 30 a 50 años, brindándole seguridad no solo a la industria nacional sino a los inversionistas extranjeros y generando una transición segura hacia las nuevas energías.

En este asunto recordemos que hay posturas contrarias que buscan apuntarle más hacia la importación de este recursos desde otros países. Sin embargo, esto podría aumentar los costos del suministro ya que habría que cubrir ciertos rubros adicionales como el transporte y la regasificación.

Y ni hablar de la palabra dependencia en momentos de crisis o coyuntura política como la que vive Rusia.

Palabras más palabras menos, habría que pagar más para tener gas en nuestras casas y negocios pero esto es algo que creo que requiere de más dfusión para que a la hora de tomar decisiones todo Colombia lo tenga claro.

Este es un sector que tiene muchísimo potencial y todavía un largo trecho para terminar de consolidarse. Por lo mismo, debemos darle el camino y la oportunidad de hacerlo (por supuesto con toda la responsabilidad del caso tanto con el ambiente y las comunidades). Además, los descubrimientos son grandes obras de ingeniería que han requerido un esfuerzo monumental por parte de las empresas, empleando a cientos de personas, y creo que eso ya es motivo de orgullo nacional.

Bienvenidas todas las posturas, pero que ojalá sea para construir soluciones.

Que se tomen decisiones sensatas por favor.