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Este es uno de los espacios más emblemáticos que tiene nuestro país para el sector del Oil and Gas y, por supuesto, las nuevas energías.

Qué honor tan grande haber podido estar allí no solo como asistente espectadora, sino como Ponente Conferencista.

Cuatro días de eventos imperdibles con expositores del más alto nivel en la industria, y una feria completamente espectacular que cautivó a todo el público.

Ahora bien, las conferencias giraban entorno a una gran diversidad de temas relacionados con asuntos geológicos, físicos, análisis de las proyecciones de hidrocarburos en el país, el Segmento Midstream (o transporte) y, en mi caso, hacia la Agenda 2030 de las Naciones Unidas.

Por ejemplo, en la intervención de Bayón, se rescató la importancia de la riqueza gasífera con la que cuenta Colombia, brindando datos como el caso de los yacimientos de Uchuva 1 y Gorgón 2, ubicados en el Caribe, los cuales han sido descubiertos en colaboración con otras multinacionales.

El panorama de yacimientos tanto de gas como de petróleo es completamente alentador, y qué bueno que la gente se entere de estos espacios para “empaparse” un poco más sobre los datos reales más no por simples especulaciones.

O si hablamos de nuevas energías, la construcción del Parque Solar San Fernando (como ya lo presenté en un artículo pasado), es una obra de ingeniería de talla latinoamericana impresionante que da una muestra sobre la visión del Grupo Ecopetrol y las compañías aliadas como AES hacia el futuro.

En mi caso tuve el privilegio de darle un giro diferente al espacio, ya que me antecedieron grandes expositores que hablaron sobre el machine learning y el estado actual del petróleo a nivel mundial, con un toque más jurídico/politológico si se le puede llamar así, a la jornada.

La Agenda 2030 es una de las propuestas más ambiciosas y robustas que jamás se haya trazado las Naciones Unidas, en colaboración con los Estados miembros.

Las 169 metas con los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible, son una gran apuesta por salvar a nuestro Planeta y mejorar la situación actual de las poblaciones en materia de DD. HH., acceso al agua, igualdad de género, entre otros aspectos.

En este panorama los conceptos de desarrollo y sostenibilidad, a diferencia de hace varios años, se unen por primera vez bajo un mismo propósito: que todas las naciones sin importar su nivel económico, social o injerencia política, puedan generar sociedades íntegras que continúen creciendo, pero cuidando el entorno a la vez.  

Es decir, que el hombre ya no compita contra la naturaleza, sino que coexista con ella.

Asimismo, hablé sobre la importancia de que el esfuerzo por cumplir la Agenda se vea acompañado de un reporte oportuno de las estadísticas locales y nacionales de los países de manera constante, y a la par, de generar YA un cambio de mentalidad en nosotros como consumidores y productores activos.

Debemos pasar del homo Economicus, para hablar del homo Sostenible.

¿Estamos dispuestos a dejar a uno por el otro?

Incluso me preguntaron si era viable o no el cumplimiento de esta, y mi respuesta es que el panorama para ciertos países es alentador, pero para otros el reporte de los avances ha sido supremamente lento y demorado, lo que va a generar muchas dificultades para alcanzar la meta.

Eso sumado a la crisis en Ucrania… pues ni hablar.

Ahora bien, el hecho de tocar temas del medio ambiente en el marco de la Agenda 2030, fue la confirmación perfecta de que hoy la industria le apuesta cada vez más a generar ese balance entre el crecimiento económico y la sostenibilidad.

Cada día se habla más de las nuevas energías, del cuidado con el entorno y de la importancia de estar a la vanguardia con el desarrollo tecnológico para que las empresas puedan robustecer sus procesos y no afecten a los ecosistemas vulnerables.

Me enorgullece ver cómo el sector del Oil and Gas en Colombia es un gran ejemplo para el mundo y que está haciendo todo lo posible por sumarle a esa meta en los próximos 7 años, 47 días y contando los minutos que nos quedan, para tocarle las puertas a las Naciones Unidas en el 20230 y no llegar con las manos vacías.

Así que si participamos en estos espacios o al menos estamos enterados de lo que allí se discute, estoy segura que tendremos mejores herramientas para opinar sobre la toma de decisiones en el Gobierno.

¡Gracias a los organizadores de la Cumbre, mis más sinceras felicitaciones!

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