Ingresa o regístrate acá para seguir este blog.

Los comentarios de Donald Trump durante el lanzamiento de su campaña política en contra de los inmigrantes Mexicanos y los latinoamericanos en general, que tenían como objetivo demostrarle a esa base extremista republicana que él es su candidato, han provocado toda clase de reacciones en los Estados Unidos y el mundo. Es posible que económicamente Trump sufra reveses importantes, pero su imperio económico, tan sobredimensionado como él lo quiere mostrar, no se va a desmoronar porque el concurso de Miss Universo se acabe o Macys no venda su horrorosa línea de ropa, o le cancelen algunos eventos en sus hoteles y campos de golf. Esa no es la consecuencia más importante de su falta de sensatez y humildad.

La consecuencia principal tampoco es que la comunidad latina haya expresado su rechazo y se haya hecho sentir en los medios, cancelando eventos, participaciones y expresando, dentro y fuera de Estados Unidos, su rechazo a esa clase de juego político, en el mejor de los casos, o de ideología, en el peor de ellos.

La consecuencia más importante es que frente a estos comentarios la sociedad americana reconoció el poder y la importancia de la comunidad Latina. Nadie quiere verse asociado a Donald Trump de ninguna manera, porque con ello alejan a un grupo que cada vez tiene mayor importancia en la economía y la política norteamericanas. Adicionalmente, en un momento donde las tensiones raciales se han agitado en la sociedad estadounidense, Trump no podía haber elegido un peor momento para comentarios de esa naturaleza. Sin embargo, es refrescante ver la unidad alrededor de la comunidad latina que el resto de la sociedad ha demostrado. Esto no hubiera ocurrido años atrás. Políticamente es claro que el voto hispano ya es determinante en la elección presidencial, pero no era claro el poder de la comunidad hispana en la economía, la sociedad y los medios. El hecho de que compañías del tamaño de NBC, Macys, ESPN y otras, claramente preocupadas por los efectos negativos que su imagen puede sufrir si se ve asociada con Trump, hayan públicamente cortado sus lazos con el magnate, demuestra que los latinos son una fuerza importante, que ya tiene un impacto fuerte en la sociedad Americana.

Es claro que el partido republicano está a las puertas de otra derrota, a menos que demuestre de manera vehemente, algo que hasta ahora no ha hecho, que la visión de Trump no es la visión del partido. Pero adicionalmente tienen que cambiar su posición frente a la inmigración. Nadie discute que el sistema migratorio estadounidense está roto, tiene fallas críticas. Ningún país del mundo quiere una frontera porosa donde miles de personas pasan diariamente sin ningún control, pero eso es así porque las leyes migratorias no representan la realidad de un fenómeno social y económico que es innegable. Estados Unidos y México necesitan ambos ese proceso migratorio, pero debe transformarse hacia algo que garantice la seguridad y el control, y eso se logra con leyes que permitan un proceso más rápido, que salga de la clandestinidad y que sea más humano, transparente y abierto. Proponer muros y promover odios y prevenciones solo genera el efecto contrario. La gran mayoría de los norteamericanos lo reconocen y reaccionan en apoyo a una minoría que es cada vez más importante y tiene un mayor peso.

Compartir post