En Indiana, el candidato al Senado Richard Mourdock dijo, hablando sobre el aborto, que «incluso cuando la vida comienza en esa situación horrible de violación, eso es algo que Dios quiere que suceda«. Palabras más, palabras menos: las violaciones, para el señor Mourdock, ocurren por voluntad divina.
Las respuestas a Mourdock no se hicieron esperar. Entre la indignación que generaron sus declaraciones, quiero compartir la carta abierta de la presentadora de MSNBC Melissa Harris-Perry:
A veces me acobardo cuando me tocan de cierta forma, incluso si es el tierno abrazo de mi esposo. Incluso algunas estaciones del año son más difíciles para mí. Nosotros, que sobrevivimos a la violación, lo llamamos gatillos [triggers]. Gastamos nuestras vidas -las vidas que vivimos después de la violación- evitando y manejando esos gatillos.
En Bogotá, el autoproclamado «concejal de la familia» Marco Fidel Ramírez le pide a un canal público responder preguntas como «¿Cuántos miembros de la comunidad LBGTI hacen parte de la nómina de Canal Capital actualmente? Anexe las hojas de vidas [sic]», «¿Cuántos miembros de Canal Capital que hacen parte de la comunidad LGBTI, se encuentran vinculados por contrato laboral, libre nombramiento y remoción, o cargo de carrera?» y «¿Qué tipo de vinculación legal o contractual tienen los presentadores de El Sofá [programa del Canal Capital dedicado a la población LGBTI, dirigido en su primera etapa por el escritor Alonso Sánchez Baute], con Canal Capital?» bajo la excusa de «exigir respeto por los niños«.
Si bien no ha habido una indignación tan generalizada como la que ha generado la declaración de Mourdock, también se han pronunciado (sobre todo en las redes sociales) en contra de este acto de indagación, más cercano a la búsqueda de Untermenschen en el III Reich. Pero el «concejal de la familia» contraatacó: Ramírez aduce ser «víctima de una persecución política y religiosa», debido a su fe cristiana. A personas como Blanca Inés Durán (exalcaldesa de Chapinero) las acusa de tener actitudes sicariales para con él. Mientras tanto, esconde la mano ante el plagio cometido por su equipo en un proyecto de ley y que admitió no leer con cuidado.
Más allá de la fe que se profese, se deben mantener alejados los púlpitos de las instituciones públicas. La religión, como la orientación sexual, es un tema netamente privado. Así como no se pregunta en la hoja de vida si el empleado escucha en sus días libres a un sacerdote, un pastor, un rabino, un gurú, un imán o un narrador de fútbol, tampoco se pregunta si al empleado le gustan las mujeres o los hombres. Preguntar eso, como quiere hacerlo el concejal Ramírez, es convertirlo en una condición para adquirir derechos. ¿No es eso, me pregunto, similar a lo que hacía Trujillo en República Dominicana cuando pedía «la palmita» a todo empleado potencial o a los despidos masivos de Chávez en PDVSA después del referendo revocatorio de 2003?
El mundo que sueñan Marco Fidel Ramírez y Richard Mourdock (y Glenn Beck, Rush Limbaugh, Ricardo Puentes, Bill Donahue y muchos otros) no es muy distinto al mundo de, digamos, los islamistas radicales. O al mundo de los ultraizquierdistas, que no ven otra posibilidad distinta al mundo que sueñan imponer. Como una cinta de Moebius, Stalin y Hitler son lo mismo: igual que Ahmadinejad y Marco Fidel Ramírez.
Profesional en Estudios Literarios de la Universidad Javeriana. Profesor universitario, escritor y poeta. Coautor de Casas de La Merced (Bogotá, 2015) y autor de artículos sobre educación y literatura publicados en Colombia y España. Cuando no escribe dedica su tiempo a observar, escuchar, leer, cocinar y caminar. El autor cree firmemente que el mundo es un montón de retazos unidos por el pensamiento, el cual los seres humanos no han comprendido en su cabalidad. Las opiniones del autor en este blog no comprometen a las instituciones donde trabaja, estudia y publica.
Como colombiano, me dolió ver las imágenes de James Rodríguez en el campo de Cardiff, antes y después de la final de Champions que su equipo, el Real Madrid, ganó a la Juventus el sábado 3 de este mes. Primero él, en su impecable vestido, acompañado de todos los demás...
Un craso error ha cometido Idartes, la entidad responsable de la política cultural bogotana, al cancelar la invitación realizada al músico venezolano Paul Gillman a participar en Rock al Parque. Antes de empezar este texto, quisiera hacer una salvedad: hace siete años no voy...
2017 tiene bastantes aniversarios para conmemorar. Cien años de la Revolución Rusa, cincuenta de Sgt. Pepper’s y Cien años de soledad, veinticinco años de la victoria de Bill Clinton, cuarenta años de los discos debut de The Clash y Sex Pistols, sesenta de la hoy...
Un trino de Mauricio Silva y el debate en el programa radial En la jugada de RCN (este último que, a mi pesar, no pude escuchar en su totalidad el día de hoy por razones laborales) suscitado después de la enorme victoria de Nairo Quintana en la Vuelta a España, pusieron a...
Usted dice: «La religión, como la orientación sexual, es un tema netamente privado. Así como no se pregunta en la hoja de vida si el empleado escucha en sus días libres a un sacerdote, un pastor, un rabino, un gurú, un imán o un narrador de fútbol, tampoco se pregunta si al empleado le gustan las mujeres o los hombres. Preguntar eso, como quiere hacerlo el concejal Ramírez, es convertirlo en una condición para adquirir derechos.»
Lo paradojico es que en Canal Capital si estan haciendo estas preguntas para ingresar a trabajar y si usted no es de la comunidad LGBTI entonces tiene menos opciones que los que si.
Es decir que Hollman esta convirtiendolo en una condición para adquirir derechos.
ETCE no se responsabiliza por el uso y tratamiento que los usuarios le den a la información publicada en
este
espacio de recomendaciones, pero aclara que busca ser la sombrilla de un espacio donde el equilibrio y
la
tolerancia sean el eje. En ese camino, disponemos de total libertad para eliminar los contenidos que:
Promuevan mensajes tipo spam.
El odio ante una persona o comunidad por su condición social, racial, sexual, religiosa o de
situación de
discapacidad.
Muestren o impulsen comportamientos o lenguajes sexualmente explícitos, violentos o dañinos.
Vulneren o atenten contra los derechos de los menores de edad.
Además, tenga en cuenta que:
- El usuario registrado solo podrá hacer un voto y veto por comentario.
Para EL TIEMPO las observaciones sobre su
contenido son importantes. Permítenos conocerlas para, si es
el caso, tomar los correctivos necesarios, o darle trámite
ante las instancias pertinentes dentro de EL TIEMPO Casa Editorial.
¿Estás seguro de que quieres cancelar el envío del mensaje?
Los datos que ingresaste se perderán.
Actualmente sigues este blog. Puedes dejar de seguirlo desde el boletín que llega a tu
correo.
Usted dice: «La religión, como la orientación sexual, es un tema netamente privado. Así como no se pregunta en la hoja de vida si el empleado escucha en sus días libres a un sacerdote, un pastor, un rabino, un gurú, un imán o un narrador de fútbol, tampoco se pregunta si al empleado le gustan las mujeres o los hombres. Preguntar eso, como quiere hacerlo el concejal Ramírez, es convertirlo en una condición para adquirir derechos.»
Lo paradojico es que en Canal Capital si estan haciendo estas preguntas para ingresar a trabajar y si usted no es de la comunidad LGBTI entonces tiene menos opciones que los que si.
Es decir que Hollman esta convirtiendolo en una condición para adquirir derechos.
Califica:
En realidad la discriminación se esta dando por la comunidad LGBTI contra todos los demás ciudadanos.
La pregunta es porque no se escogen las mejores personas para los trabajos y y no simplemente porque pertenecen a determinado grupo.
Su blog aplica pero la raza superior que debe ocupar todas las posiciones y ser privilegiada es precisamente la LGBTI.
Si la canción sigue siendo la misma.
Califica:
Respeto a la diferencia. Una de nuestras grandes falencias. Muy buen blog.
Califica: