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Recuerdo estar hablando con mi papá en un semáforo capitalino, debatiendo sobre si apagar el carro en los semáforos  valía o no la pena porque supuestamente lo que no consumiría estando apagado, lo haría en el encendido y estaríamos además acortando la vida útil de la batería y el motor de arranque. Siendo cierto que se consumiría más en un motor frío   -las máquinas actuales consiguen su temperatura de trabajo óptima muy rápido-,  años después de efectivas investigaciones y su consecuente aparición y difusión gracias a la electrónica y la ingeniería de punta, la razón la tienen los sistemas intelligent stop start que funcionan en varios modelos de la mayoría de las compañías en el mundo.

El objetivo del sistema es elemental: apagar automáticamente el motor y economizar gasolina o Diesel con la obvia reducción de emisiones nocivas, mientras se detiene después de algunos segundos en un semáforo o atasco, aquellos  que »contaminan» a cualquier ciudad alrededor del planeta. El proceso termina con el encendido automático del motor una vez que se pisa el embrague en los de caja mecánica, y se suelta el freno en los automáticos

Históricamente Citroen estuvo en diferentes épocas cercanas con la Fiat, a punto de lanzar el sistema hace una y dos décadas respectivamente. La que comercialmente obtuvo algún rédito pequeño fué Volkswagen primero con el Polo de 1983, y luego en el Golf de tercera generación; al final, los mayores costos, y la baja confiabilidad producto del menor conocimiento técnico de la época, hicieron que el sistema desapareciera y reviviera en 1999 por corto tiempo con el pequeño y sofisticado Volkswagen Lupo.

Nacieron de nuevo hace casi 3 años (en los modelos híbridos son omnipresentes), y actualmente se utilizan hasta en los autos más pequeños de las marcas. Por ejemplo, Ford lo ofrece en su pequeño KA europeo, un exitoso city car,  el cual logra en su motor 1200 de gasolina reducir las cifras de consumo y contaminación notablemente.

Toyota declara una disminución promedio del 15% en conducción urbana, a la vez que Mazda declara un 14%, y para el proximo año Ford estima la reducción promedio del consumo de sus autos que lleven el i stop, en un 10%. En modelos puntuales, grandes y pesados como un Land Rover Freelander 2 TD4 (diesel, motor 2,2 litros), se logra una disminución del 20% en conducción ciudadana (espectacular cifra), y un 8% en el ciclo combinado ciudad-carretera.

Para que todo funcione a la perfección como se espera de un vehículo nuevo del siglo XXI, se requirió diseñar un motor de arranque más potente y durable dado el incremento de los ciclos encendido y apagado, así como de una batería no solo más durable, sino de mayor capacidad para que supla las necesidades  -que son bastantes-,  estando apagado el motor una vez esté atrapado en un monumental trancón.

A ésta la apoya un alternador con mayor capacidad de generar kilovatios, y con mejor refrigeración (el enemigo No 1 de los alternadores es la alta temperatura). Toda ésta técnica de última generación le permitirá por ejemplo en un fuerte aguacero, usar plenamente las luces, exploradoras, ventilación, desempañador, y los limpiabrisas con la certeza de que volverá a arrancar automáticamente, una vez pise el embrague.

Los sistemas se han refinado mucho para que la detención y el arranque sean lo más suaves posibles. A los que les preocupa el tiempo de respuesta en el encendido antes de que lo chifle con el pito el auto de atrás, una vez que el de adelante inicia la marcha, todo el sistema trabajando coordinada y eficientemente le permitirá según lo declarado por una de las japonesas, prender el motor en 0,35 segundos, con unos tiempos muy parecidos en las demás marcas.

En Canada el i stop será sumamente efectivo dado que en la normatividad que rige en Toronto, existe una dura pero efectiva ley que penaliza a los buses y vehículos que duren más de 1 minuto encendidos en neutro por cada hora; la cantidad a pagar puede ir dependiendo del caso, hasta los 5000 dólares: ni pensemos en lo que sucedería en nuestro diario vivir Colombiano…….. 

Seguramente como sucede con muchos inventos aparatos y sistemas que han hecho progresar el automóvil casi exponencialmente por su popularización en aras de su mayor seguridad, eficiencia, y comodidad, esperamos que los sistemas intelligent start stop, aterricen a largo plazo  -ojalá fuera a medio-,  por éstas tierras, y en masivas cantidades. Por ahora, recuerdo que nuestros amigos de BMW en su crossover X1, y Audi en el reciente A1, nos ofrecen en el concesionario el interesante sistema; entonces, a consumir, y a contaminar menos!!!

*Mi twitter:  http://www.twitter.com/@MASERAGRANTURI    

 

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