Que la felicidad sea una búsqueda de todos no es ninguna novedad, pero que un país se interese en ella hasta el punto de crearle un ministerio, sí que lo es. El país al que nos referimos se llama Emiratos Árabes Unidos, quien ya cuenta con una ministra de la felicidad, y semejante cartera se le asignó a una joven mujer llamada Ohoud bint Khalfan Al Roumi. Ella ostenta el título oficial de ser: La Ministra del Estado de la Felicidad y el Bienestar, en este país del Medio Oriente.
Entre los primeros beneficiados del singular ministerio están los consumidores, en general, quienes ahora son atendidos en Centros de la Felicidad del Cliente. Estos reemplazaron a los antiguos Centros del Servicio al Cliente, y la fórmula para lograr el cometido se resume en la siguiente suma de componentes:
Un empleado orgulloso +
Una entidad dedicada +
Un positivo y proactivo usuario = felicidad del cliente.
Para los emiratíes, la suma de estos tres elementos es esencial para tener un verdadero cliente satisfecho. Matemática social y básica.
Ser feliz por ley
La felicidad se hace tangible por medio de ordenanzas como aquella que dicta que «En entidades del estado se deben destinar –por lo menos– dos horas al mes a actividades que promuevan la felicidad y el positivismo…».
Las entidades estatales en los Emiratos Árabes han creado un nuevo cargo llamado directores o promotores de la felicidad, que tienen como labor principal «..promocionar, entre empleados (y clientes) una cultura de la felicidad y el positivismo dentro de la entidad, de las cuales son empleados, y hacerla parte del entorno y la rutina de trabajo; coordinar la implementación del programa nacional para la felicidad y el positivismo; medir y analizar periódicamente niveles de felicidad y positivismo dentro de la empresa, y reportar resultados alcanzados».
Capacitación y entrenamiento
Implementar la felicidad requiere de mucho conocimiento y preparación, razón por la cual los encargados de llevarla a cabo, en los Emiratos Árabes, fueron a capacitarse en las reconocidas Universidades de Oxford, en Inglaterra, y Berkley en los Estados Unidos.
El programa de capacitación lo conforman cinco pilares de conocimiento, que incluyen:
– La ciencia de la felicidad y el positivismo
– Atención plena (Mindfulness)
– Liderazgo de un equipo feliz
– Felicidad y políticas en un trabajo gubernamental
– Medición de la felicidad
El empleado estatal emiratí adquiere ahora un nuevo rol de responsabilidad y significado, con un flamante título: El Empleado de la Felicidad del Cliente. Si las metas se cumplen –esto es: el cliente sale siempre feliz de una oficina estatal– todos los funcionarios podrán, con gran mérito, ser declarados empleados del mes.
Es pertinente agregar que en otros países como Bután, creador de la idea, existen también ministerios parecidos al de los Emiratos Árabes. La búsqueda de la felicidad (the pursuit of happiness) aparece también resaltada como un derecho en la constitución de los Estados Unidos de América. La felicidad se ha estado buscando siempre y por todos lados.
Ya que Colombia se encuentra entre los países más felices del mundo, la apuesta a un ministerio de la felicidad tendría sentido.
Invito a mis lectores a que se imaginen un ministerio de la felicidad en nuestro país. ¿Cómo creen ustedes que sería? Quedo pendiente a sus comentarios. Para terminar, les dejo el discurso de clausura de la ministra Al Roumi, en un foro internacional de la felicidad.
Feliz día para todos.
Marcelino Torrecilla N (matorrecc@gmail.com)
Abu Dhabi, Emiratos Árabes Unidos
Noviembre de 2017
Referencia
NA. (2017, November 10). Know what. Retrieved from https://www.happy.ae/en/initiatives/Work/3#
Fotos
StepFeed
Know what
Psicología positiva, conocida también como la ciencia de la felicidad, ha concluido a través de sus investigaciones que es necesario tener cubiertas las necesidades básicas para poder hablar de bienestar y de felicidad. Claramente estas necesidades en Emiratos Árabes están cubiertas para la mayoría de la población, pero aún así hay grandes tasas de depresión como lo dice la ministra en el video, lo que demuestra que en el dinero, la riqueza y las cosas materiales no está la felicidad. La ciencia también ha demostrado que las personas podemos, a nuestra voluntad, aumentar nuestra felicidad a través de nuestras propias acciones. Yo considero que si bien es cierto en Colombia muchas personas aún están por debajo de la satisfacción de sus necesidades básicas, sí es posible adelantar programas de bienestar y felicidad con los cuáles todos, desde lo que tenemos o cómo vivimos, podamos aprender a ser conscientes de las cosas positivas que sí nos pasan, así sean pequeñas; aprender a descubrir nuestras fortalezas personales y a usarlas en nuestras comunidades para ayudarnos unos a otros y a mejorar nuestras relaciones on los demás. Con estos elementos ya hay construcción de bienestar y con él grandes beneficios. Esto mientras logramos tener gobiernos con un verdadero interés en el bienestar de la gente dispuestos a garantizar para todos salud, educación y acceso a un trabajo digno con los cuáles se satisfagan las otras necesidades.
Califica:
Primero está la seguridad y la tranquilidad, la felicidad se consigue pero cuando están las dos primeras y Colombia está lejos de eso.
Califica:
Exacto. Es cuento viejo. Y después dicen que los socialistas en Colombia no ponen de ejemplo a Venezuela.
http://www.bbc.com/mundo/ultimas_noticias/2013/10/131024_ultnot_venezuela_viceministerio_suprema_felicidad_az
Califica:
JAJA ALLA CON PLATA NO HAY PROBLEMA, AQUI EL JUHAMPON A MALGASTAR LO QUE NO HAY, LOS MINISTERIOS AQUI SE CREAN NO PARA AYUDAR AL AGENTE SI NO PARA PAGAR FAVORES Y EMPLEAR MAS GENTE DE LA QUE SE NECESITA . BANDIDOS ENMERMELADOS
Califica:
¿Cómo sería la corrupción en el Ministerio de la felicidad?
Califica:
Ojala se pudiera crear felicidad por decreto… no por tener dinero se es feliz y tampoco por no tenerlo se es infeliz…. ademas esto ya es cuento viejo : http://www.univision.com/noticias/noticias-de-latinoamerica/venezuela-crea-un-ministerio-de-la-felicidad (2013)
Califica:
El problema es que con la pobreza y la desigualdad que existe en nuestro país no es posible que la gente le crea en esta utopía, los dirigentes colombianos son los más corruptos del tercer mundo y solo están interesados en lograr beneficios personales, los colombianos no son los más felices del mundo, eso es una falacia, somos los que más tratamos de evadirnos de esta cruel realidad, el 90 por ciento de la gente está por debajo del nivel de pobreza absoluta y mientras un pueblo no tenga satisfechas sus necesidades básicas no creo que pueda ser feliz.
Califica: