Escribir lo que Me gusta y No me gusta, es un ejercicio de escritura que propongo en los grados décimo y once de bachillerato. Un ejercicio que tiene más de ancho y largo de lo que parece.
Esta es una muestra de lo que escriben los chicos, de lo que les gusta y no les gusta.
ME GUSTA DORMIR
Por Johana Valencia.
Me gusta dormir, me gusta mucho dormir. Me gusta el reguetón, sobre todo cuando puedo dedicarles canciones a las otras peladas que son muy grillas. Me gusta cantarles esa canción que dice:
«Ella quiere sexo, yo bellaquera
Darte como una perra, como una culquiera
Jalarte por el pelo, agarrarte por el suelo
Usarte como escoba, aulla como loba”
Me gusta comer perro en la calle y caminar con mis amigas.
A veces no me gusta mi cuerpo. No me gustan cómo se ven mis tetas. A veces me gustaría hacerme una cirugía, para ponérmelas más grandes. Pero otras veces no quiero, porque cuando un hombre se fije en mí, tiene que gustarle otra cosa que no sea solo mi cuerpo.
No me gusta cómo se ve mi pelo cuando no lo tengo planchado.
Ya no me gusta estar con mi papá, ni con mi mamá. Antes sí, pero ya no. Pero a ellos como que les hace falta estar conmigo.
Me gusta un man de por la casa. Es un papacito. Hace barras y juega micro. Lo malo es que es muy callado. Y cuando hablamos se pone muy nervioso. Yo quisiera que me echara los carros, pero a lo bien, sin miedo. Pero a este man, es a mí la que me toca echarle los perros. Y eso no aguanta, porque me siento muy grilla.
No es más: Johana Valencia.
ME GUSTA, NO ME GUSTA
Por Oscar Peña.
Lo que más me gusta es perder clase en el colegio, cuando los profes no van o tienen reuniones, entonces nos encontramos con los parceros del colegio y echamos caja parejo. Me gustan los frijoles de la abuela, sus arepas de chócolo y las aguapanelas con leche que hace son muy ricas. Me gusta Cristina, una pelada del colegio, pero ella no se llama así. Le puse este nombre para que no sepa quien es. Pero ella me gusta porque es muy mamacita. Y muy inteligente. Creo que le gusta leer, porque le va muy bien en español. Además cuando se sienta en la silla del salón, se le sale una curva por la cintura que me pone loco. A veces cuando hablamos, nos entretenemos mucho tiempo. Pero otras veces, sobre todo cuando ella se queda callada, yo no tengo tema para hablar, porque ella es siempre la que tiene cosas para contar. Yo creo que las mujeres hablan más que los hombres.
Además, los chicos dejaron el numeral en sus redes sociales: #ME GUSTA #NOMEGUSTA
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