Yoly Quintero, la empresaria de vestidos de baño artesanales de lujo en Colombia Moda

La historia comenzó como una alternativa de ingresos. «Me surgió la idea de mandar a fabricar vestidos de baños en talleres del barrio donde vivía; los bordaba y los vendía entre mis amigas.

A través de personas referidas, vendía a personas que viven en Estados Unidos, Francia y España».

Los vestidos de baño empezaron a gustar, y Yoly decidió asociarse con su hermana Dalia para formalizar una empresa hace dos años. Luego, Ángela María Franco Alzate, publicista-docente de Ideartes, les diseñó la imagen corporativa.

Se ve en que Mar y Limón ha vinculado en su proceso productivo a mujeres madres y/o cabezas de familias con años de experiencia en el arte, para crear vestidos de baño en telas unicolores.

Excelente. En esta Feria nos hemos encontrado con que hay compradores interesados en manejar nuestra marca.

 

Otros quieren ser distribuidores de nuestro producto, entre ellos, clientes de Estados Unidos, Antillas francesas, España, Venezuela, Republica Dominicana, Perú y Ecuador.

 

 

En algunas referencias no hacemos más de 30 vestidos de baño idénticos. Eso distingue a la marca.

 

Por lo general, y en la mayoría de las referencias, nunca una queda igual a la otra.

 

Optamos por darles a las bordadoras libre albedrío de manipular los colores y orden de los insumos situados en las prendas.

 

Terminan una prenda y la guardan para no recordar los colores e insumos que utilizaron.  Esto permite también que su creactividad sea puesta en escena. 

 

Nuestros precios oscilan entre $160.000 y $280.000, dependiendo de la prenda, de la dificultad de su elaboración, y de los materiales y cantidad de insumos.

En www.marylimon.com pueden deleitarse más. En la segunda foto, Yoly Quintero, de pelo corto.