Ingresa o regístrate acá para seguir este blog.

Durante éstos días me ha surgido una pregunta. Comenzó con una palabra, pero pronto me di cuenta que la mayoría de las palabras en español están mal inventadas. Hablamos un idioma que tiene aproximadamente 400.000 palabras, de las cuales según estudios una persona común y corriente usa 300. ¡Por Dios sólo 300! Ni el 10% de todo el idioma. Con ustedes no pasa tanto así, el mismo estudio revela que una persona culta (como ustedes, ilustres lectores) usa en promedio unas 1.500, una cifra que no está del todo mal para la extensión del idioma. Yo como además de ser desempleada, soy desinteligente ¿cómo que esa no es una palabra?  Bueno, aquí una muestra de esa desinteligencia que me invade, usaré unas 588.

De éste hermoso idioma mal hablado e irrespetado día a día al escribir, quiero sentar mi voz de protesta y alarma, porque está mal inventado. La mayoría de las palabras de mi vocabulario cotidiano no tienen sentido. ¿Cómo es posible que un estado de ánimo se describa con lo que sobra del fruto de un vegetal? ¿Por qué tusa? Yo jamás he quedado verde e inservible después que me terminan, todo lo contrario, termino roja de tanto llorar, inservible quizá si, un poco, pero con los días vuelvo a estar bien.  

Otras dos que no tienen sentido, o por lo menos son incongruentes: separado y todo junto, significan cosas opuestas, pero según su forma de escribir no lo pareciera. ¿Quién inventó esto? Seno es otro ejemplo de lo que estoy diciendo, matemáticamente es algo hueco y me miro dentro de mi blusa y mi cuerpo me dice todo lo contrario. Quien inventó el español, seguro fue un hombre, pero uno virgen. 

O probablemente no era virgen, pero si mentiroso como tantos, sino entonces que me expliquen por qué demonios futuro tiene un ¨tu¨ atravesado en toda la mitad. No le encuentro el sentido, otra palabra sin lógica es: olvidar, por qué me piden ¨dar¨ más después que lo di todo. Es un idioma injusto.

Tan injusto que se inventaron la palabra sueño, para la cual impertinentemente hay que estar muy despierto para que se cumpla. Sin duda mal inventado, o mal descubierto, como quieran verlo. Sin pensar en lo que podría pasar después ¿Cómo fue que le pusieron el nombre a la hierbabuena, antes que a la marihuana? También es envidioso éste idioma ¿Nombrar esquimales, a los esquimales? ¿Equimal? Si lo único que saben es andar en esquí, ¡por Dios! 

Tampoco sé, por qué le pusieron naranja a la naranja ¿Qué fue antes el color o la fruta? ¿Se le llama naranja a la naranja, por el naranja o se le llama naranja, a el naranja por la naranja? ¿Quién me lo explica?

Hay otras que si tienen un poco más de sentido, como novio. Una de mis preferidos, no por el compromiso, sino por su significado, si la analizamos bien novio, quiere decir ¨no vio, bien con quién carajos se estaba metiendo¨. Porque hay que ver lo que nos toca, con esta palabra si que pensaron en el futuro, o sea en el ¨fumiro¨.

Así llegamos a las palabras que pueden estar correctas, pero que tienen un problema en la forma que están escritas, lo que vendría siendo una mala ortografía según si significado. Pongo como ejemplo casarse, que en principio no está mal, porque me imagino que viene de ¨casa¨ (hogar), pero debería escribirse con ¨z¨. Me voy a cazar, porque hay que buscar y escoger muy, pero muy bien la presa. Votar, que debería ser con ¨B¨ de burrada y quedar botar, porque la política es basura. En este sentido le dejo un tip para todos los hombres, la palabra o mejor dicho, el verbo llámame, también tiene un error de ortografía gráfico, debería ser ¨yamame¨ de ¨ya¨ no más tarde, ni mañana, ni pasado. YA que estoy cansada, me mamé.

Y para terminar los dejo con la que me parece la peor de todas, la que refleja el machismo y la ignorancia de quien inventó el español. Menstruación ¿menstruación? ¿Qué clase de palabra es esa? ¡Por favor! Se nota que jamás le llegó. Le hubiera puesto ¨monstruoación¨ porque los síntomas y los dolores no son normales, nos hace sentir como monstruos. Este idioma les quedó mal inventado, propongo actualizarlo. 

Síganme en Twitter: @Des_empleada

Compartir post