Jugar y aprender en una época eran palabras incompatibles. Parecían estar aisladas por mundos totalmente diferentes. La diversión estaba relacionada con la niñez o la falta de responsabilidades y el aprendizaje, por lo menos a niveles profesionales, tenía que ver con una vida más intelectual, que en algunos casos no permitía estar en modo de entretenimiento.
Sin embargo, ahora las cosas son diferentes. Hoy en día, gracias al desarrollo de la tecnología, el auge de aplicaciones, y la digitalización de diferentes aspectos de la vida, ha aparecido un nuevo segmento que ofrece nuevas oportunidades de negocio para las empresas en la actualidad. Se trata de la gamificación, que no es otra cosa que el uso de dinámicas de los juegos en el ámbito profesional y laboral.
El auge de esta nueva modalidad del mundo moderno está relacionado al auge de la tecnología y de manera específica al desarrollo de la industria de los videojuegos que ha logrado convertir el juego en una experiencia también apta para adultos.
Es por eso que cada vez más las empresas más grandes del mundo están implementando técnicas utilizadas en dinámicas de diversión para estimular, formar y potenciar el talento dentro de las empresas. La gamificación además de transformar las tareas poco atractivas en estimulantes, permite medir acciones concretas. Desde muchos departamentos de recursos humanos han empezado a utilizar esta herramienta para identificar el talento dentro de la empresa y descubrir las fortalezas a mejorar de cada colaborador.
La razón del éxito de esta técnica se debe a que está basada en la existencia de ocho motores básicos que nos mueven a participar en un juego: sentirnos parte de algo grande, los logros que podemos conseguir, la estimulación de la creatividad, el sentido de propiedad, la afinidad o la conexión social, la impaciencia, la imprevisibilidad y la sensación de saber que jugando evitamos que pase algo malo.
Por otra parte, las dinámicas del aprendizaje divertido se han integrado con éxito en los procesos de atracción y selección de personal, donde una vez determinado el perfil deseado por la organización, recursos humanos puede identificar los comportamientos requeridos para el puesto mediante procesos individuales o grupales, recolectando información difícil de obtener en una entrevista tradicional.
De esa forma, en el ámbito del Contact Center se han observado numerosos beneficios ante la aplicación de la gamificación. Es un sector que se caracteriza por el elevado porcentaje de rotación. A través de actividades divertidas la empresa consigue motivar a los empleados a través de incentivos y premios, permitiendo involucrar a los agentes, acercándoles a las demandas de los clientes y aumentando así la calidad del servicio.
Una de las empresas que se ha dado cuenta de la importancia de la gamificación como sector de negocio es Lenovo. La fidelidad de sus consumidores es uno de los atractivos que ha convencido a esta multinacional a apostar por el sector del gaming como uno de los ejes de su oferta.
Aunque esto es solo el comienzo de una forma de implementar el juego en las compañías, es evidente que la gamificación que inició como una tendencia hace algunos años ahora se ha vuelto una de las mejores formas de incrementar la productividad en las empresas. Una herramienta imprescindible en la actualidad.
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