Cerrar Menú Blogs
Las opiniones de los blogueros son de su estricta responsabilidad y no representan la opinión de este portal.
Profile image

Ingresa o regístrate acá para seguir este blog.

Seguir este blog



El mito de la paz laica fue ideado por Kant en su famoso libro Hacia la paz perpetua (1795). Kant declaró que los ejércitos permanentes (miles perpetuus) deben desaparecer totalmente. Que, de los tres poderes, el militar, el de las alianzas y el del dinero, sólo este último podrá ser ciertamente el medio bélico más seguro. Así profetizó, justificó y legitimó el Estado plutocrático de nuestros días.

Aún más, para el filósofo que nunca salió de Könisberg (su pueblo), toda paz debe ser instaurada. Y, además, se debe marginar a aquellos filósofos o intelectuales sospechosos de difundir una propaganda contraria.[1] No es de extrañar que Kant sea el ideólogo de la escuelas neoliberales.

Recientemente, el filósofo español Gustavo Bueno acusó a la argumentación de Kant de mantenerse en el más ignorante idealismo histórico.[2] El mito de la paz perpetua kantiana no ha acabado con las guerras reales a pesar de que nos obligue a decir no se debe hablar de «guerra», sino de «métodos para resolución de conflictos». Como toda ideología, la de la paz se mueve en el terreno psicológico subjetivo, o incluso en el terreno de la historia ficción, pero se desmorona en el terreno de la historia real.

Se necesita recobrar el respeto por las tradiciones católicas. El símbolo de la paloma de la paz (que proviene de una tradición religiosa) no puede hacerse groseramente laico y maltratarse como si se tratara de un partido de fútbol. “Mi paz os dejo, mi paz os doy; no la paz de este mundo”, leemos en el Evangelio de Juan. Hay que cesar tanto afán de riqueza económica o de cultura por cultura. Austeridad y abstinencia. Interés por la tradición hispana para hacerle frente al imperio angloamericano, que no tardará en reforzar el muro económico-religioso con México. La historia universal es la lucha de los imperios.

 

Notas:

 

[2] Kant, Hacia la paz perpetua. Un esbozo filosófico, trad. de Jacobo Muñoz, Gredos, Barcelona, 2014p. 331.

[3] Gustavo Bueno, “La idea fuerza de la paz”, en El Catoblepas. Revista crítica del presente, núm. 148 (junio, 2014), p. 2. Disponible en: http://www.nodulo.org/ec/2014/n148p02.htm [consultado el 27-09-2016].

(Visited 1.084 times, 1 visits today)
PERFIL
Profile image

Dr. Profesor-investigador universitario, autor de algunos libros sobre crítica e historia literaria y de las ideas. E-mail: spineda@colmex.mx Imagen: pintura de Yolanda Pineda

Más posts de este Blog

Ver más

Lo más leído en Blogs

1

Meet The Beatles fue el primer disco que me llegó como(...)

2

Desde hace varios años empecé a preguntarme sobre la comunicación interdimensional.(...)

3

"Estar en forma es una tarea complicada, ya que la comida(...)

10 Comentarios
Ingresa aquí para que puedas comentar este post
  1. Uy que mal. usted mezcla unas cosas con otras de manera desordenada, disapersa e inconexa, y termina demandando respeto por las tradiciones catolicas y la paloma de la paz. Jajajaja. Respeto a cuales tradiciones? A quemar librepensadores como Hypatia o Giordano Bruno? A violar menores? A desterrar a las madres solteras?

    • guialiteraria

      No lo culpo. El suyo es un comentario típico de la mala educación universitaria. La contribución de la Iglesia es de primera línea en la evolución de la ciencia moderna o contemporánea, y deja en ridículo a la visión de acusar al catolicismo como una corriente reaccionaria. Copérnico era un monje polaco. Para el caso de Giordano Bruno (que también era católico) hay que comprender el papel de la Inquisición. Cito aquí al filósofo Gustavo Bueno: “Los peligros de una educación popular masiva desde supuestos estrictamente laicos son cada vez mayores. La supresión de la Inquisición y de otros controles comparativamente más racionales del Antiguo Régimen, permitió el desbordamiento de las corrientes más delirantes que actúan todavía en nuestro siglo, como puedan serlo el espiritismo, el mormonismo, el satanismo, el culto a los extraterrestres, la cienciología, la teosofía, la parapsicología, los horóscopos, las adivinaciones, quiromancias, profecías, escatologías […] La Inquisición representó en muchas ocasiones un principio de racionalidad ante la pululación de fenómenos patológicos –aquelarres, posesiones y obsesiones diabólicas, brujerías…” (Ver: http://www.nodulo.org/ec/2009/n084p02.htm)

  2. ricardo908184

    la religion es el opio de los pueblos y este articulo ,argumenta a favor de los catolicos todo tipo de atropellos como en la inquisicion En un pais laico no se debe tener en cuenta las posturas segadas de la religiones .

    • guialiteraria

      ¿Cree usted vivir en un país laico? El único laico es el “dios” Estado, a pesar de que en la cacareada Constitución del 91 se invoque a Dios se invoca a Dios al inicio. No hay que confundir el aparato estatal con la nación histórica. Esta sigue siendo mayoritariamente religiosa. Habla en español y reza a Jesucristo.

  3. jaimecastillo0514

    Muy valiente. Defender una visión católica en una sociedad y unos medios (sobre todo esto último) que cada vez es más intolerante con la religión es importante y loable. Gracias

Reglamento de comentarios

ETCE no se responsabiliza por el uso y tratamiento que los usuarios le den a la información publicada en este espacio de recomendaciones, pero aclara que busca ser la sombrilla de un espacio donde el equilibrio y la tolerancia sean el eje. En ese camino, disponemos de total libertad para eliminar los contenidos que:

  1. Promuevan mensajes tipo spam.
  2. El odio ante una persona o comunidad por su condición social, racial, sexual, religiosa o de situación de discapacidad.
  3. Muestren o impulsen comportamientos o lenguajes sexualmente explícitos, violentos o dañinos.
  4. Vulneren o atenten contra los derechos de los menores de edad.

Además, tenga en cuenta que:

  • - El usuario registrado solo podrá hacer un voto y veto por comentario.
Aceptar
¿Encontraste un error?

Para EL TIEMPO las observaciones sobre su contenido son importantes. Permítenos conocerlas para, si es el caso, tomar los correctivos necesarios, o darle trámite ante las instancias pertinentes dentro de EL TIEMPO Casa Editorial.


Debes escribir el comentario
¡Gracias! Tu comentario ha sido guardado
Tu calificación ha sido registrada
Tu participación ya fue registrada
Haz tu reporte
Cerrar
Debes escribir tu reporte
Tu reporte ha sido enviado con éxito
Debes ser usuario registrado para poder reportar este comentario. Cerrar