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Con un triunfo claro e inobjetable en el Estadio La independencia en Tunja, Millos cerró su mejor campaña clasificatoria en torneos cortos de toda la historia. Acumuló 37 puntos, sostuvo el liderato durante 17 de las 18 fechas jugadas, se consolidó como cabeza de serie para el posterior sorteo para la conformación de los cuadrangulares finales, y se hizo al llamado punto invisible, que le permite dirimir a su favor cualquier empate en puntos con otro equipo.

No obstante, a partir del próximo domingo todos los logros alcanzados en esta fase se convertirán en datos meramente estadísticos y  hasta anecdóticos. La reglamentación del torneo indica que, salvo el mencionado punto invisible, todos los equipos arrancan en las mismas condiciones y con las mismas expectativas y posibilidades de alcanzar el paso a la finalísima de diciembre.

En nuestro caso, es motivo de esperanza el hecho que el equipo cerró la fase clasificatoria en franca recuperación del bajón futbolístico sufrido luego del viaje a Madrid.

Es cierto que para lograr el objetivo del título es necesario superar a cualquier equipo que el calendario nos ponga en frente, pero es evidente que el cuadrangular que nos correspondió resultó ser el más parejo y complicado, por la calidad de la nómina del Junior, por la experiencia de la plantilla del Tolima, y por las complicaciones que implica enfrentar a un equipo sin ninguna presión y con una plaza de tanta dificultad de acceso como el Pasto.

Como se arranca de ceros todos los hinchas del FPC tenemos el derecho a soñar. Por eso el señor «Cheché» Hernández aseguró el domingo en el Carrusel Caracol que no le preocupa cerrar los cuadrangulares en Bogotá porque cree que cuando llegue ese partido ya junior tendrá lista y asegurada su clasificación a la final. Así mismo, el señor Edward Jiménez hoy afirma a la prensa que pasto peleará con toda su posibilidad de pelear por el título.

No me cabe duda que de mantener el nivel futbolístico del equipo, la claridad mental del técnico así como la actitud y compromiso exhibido por todo el equipo a lo largo de la temporada, Millos peleará con todas las armas posibles la posibilidad de acceder a la final, aunque indudablemente la tarea no será nada fácil.

En comienzo nos correspondió enfrentar al Junior en Barranquilla. No es exagerado afirmar que este equipo es el conjunto, junto con el verde de Medellín, con mayor inversión en nómina, por lo que a  priori podría considerarse como el favorito del grupo, sin embargo, nuestro Millos cuenta con toda la capacidad y jerarquía para luchar el partido en igualdad de condiciones.

No obstante no hay que obviar la hora a la que la DIMAYOR -léase Ramón Jessurum- programó el cotejo: 3:30 PM, cuando el rayo del sol y la humedad pueden producir mayor efecto negativo sobre deportistas no acostumbrados a jugar en esas condiciones.

Como sea, un equipo que aspire a ser campeón debe mentalizarse para ganarle no solo al equipo rival en el campo, sino a posibles decisiones arbitrales en contra y hasta a las condiciones climáticas adversas. Con toda seguridad Hernán Torres y sus muchachos son conscientes de ello y dejarán en el terreno de juego hasta la última gota de sudor y esfuerzo.

Antes del compromiso en Barranquilla, Millos debe afrontar el partido de vuelta por la Copa Suramericana ante el dificilísimo Gremio.

Aunque la diferencia por remontar es mínima, el antecedente por lo ocurrido con Palmeiras no debe llevarnos a creer que se jugará en condiciones similares. Por tradición, los equipos de Porto Alegre son diferentes a lo que está uno acostumbrado a ver en materia de fútbol en el resto de ciudades del Brasil.

En aquellos equipos se acostumbra a darle prioridad a la táctica y al resultado por encima del espectáculo. Esto lleva a pensar que el partido del jueves tendrá que afrontarse con mucha inteligencia y mesura por parte de los nuestros para tratar de conseguir el gol que iguale la serie, sin descuidar nuestro sistema defensivo para evitar que nos conviertan un gol que nos complicaría definitivamente las intenciones de avanzar a semifinales.

Igual, el DT y varios de los jugadores han manifestado a diversos medios que el objetivo es apuntarle a los dos torneos, y a decir verdad, confío en que contamos con un grupo humano y con el fútbol suficientes para afrontarlos con éxito, así que esperemos que el nivel hasta ahora mostrado se mantenga o se supere, que nuestros delanteros estén más lúcidos en el arco rival y conviertan las oportunidades que se les generan desde el medio campo, y que paso a paso, con humildad, con valentía y con las buenas energías y el acompañamiento masivo de nosotros los hinchas, podamos conseguir las alegrías y triunfos por los que tanto se ha luchado este semestre.

Cordial y albiazul saludo

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