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Por: Valeria Isabel Restrepo
Premiar el buen desempeño en las redes sociales y analizar el mapa de rentabilidad que tienen en activos digitales los actuales Congresistas es una de las habilidades interdisciplinarias que ofrece la agencia Toro Digital, firma experta en marketing político. Para esta ocasión, La Tribuna Digital —nombre del proyecto— llega con su lupa 4.0 al Congreso y con un ranking de los 10 mejores senadores y representantes a la cámara en redes sociales.
El ranking se basó en la medición de distintos KPIs digitales, es decir, número de publicaciones, alcance, engagement (compromiso y fidelidad de los seguidores), conversación espontánea de los usuarios frente a publicaciones de los congresistas y réplicas de esta conversación en medios de comunicación. Los anteriores datos, se recolectaron entre el 19 de junio y 20 de julio de 2022, con el fin de lograr una aproximación real al nivel de influencia digital de cada uno de los parlamentarios.
En un primer escenario se encuentra el ranking a “mejor actividad en canales propios” para Senado de la República y Cámara de Representantes. En esta categoría las redes sociales auditadas fueron Facebook, Twitter e Instagram. Este desempeño refleja qué tanto engagement, alcance e interacciones generan los congresistas con el público. Ojo, es muy diferente al número de seguidores que tienen, pues en este caso se está premiando a quienes realmente interactúan con la audiencia, ya que no es lo mismo tener 5 millones de seguidores si solo interactúa con dos. En esta categoría obtuvo la mejor puntuación en el Senado, Soledad Tamayo, del Partido Conservador; y en la Cámara, Vladimir Olaya, del Centro Democrático.
Seguido, nos encontramos con la categoría “performance por impacto”, es decir, la medición de la influencia de los tuits de cada congresista dentro de la opinión del público; lo que piensan, sus actitudes y las emociones producidas. Ese impacto lo generan los golpes de opinión y la conversación que la audiencia genera a partir de esas publicaciones en Twitter —ya sea positiva o negativa—. Por eso, tenemos en el Senado a María Fernanda Cabal del Centro Democrático y en la Cámara de Representantes a Cathy Juvinao del Partido Verde, cada una llevando la delantera en esa tribuna. Ellas ponen un tuit y genera impacto en términos de repercusión en la conversación espontánea, narrativa que luego se sube a los medios de comunicación donde la conversación logra expandirse con mayor eficacia hacia otros sectores de la población.
