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Siempre será una ventaja tener amigos chefs, sobre todo en ciudades diferentes a las que uno vive. Lo digo porque ellos suelen atenderte bien cuando vas a visitarlos, y permiten con sus consejos que pongas el ojo donde tiene que ser. Me pasó hace menos de un mes, cuando estaba organizando un recorrido gastronómico por Santa Marta, y mi amigo Roberto Hernández me dijo….”- Ey, si vas a venir tenemos que visitar Guásimo sabores únicos“. En su momento no le presté mucha atención pero accedí gustosamente a dejarme guiar por su amplia experiencia en la costa Caribe colombiana. Cuadramos entonces una cita en horas de la noche con Fabián Rodríguez, dueño del sitio, y lejos estaba de imaginarme la enriquecedora tertulia gastronómica que me esperaba. Y es que Fabián es mucho más que un chef; su lugar está ambientado con pinturas y con esculturas hechas por él mismo. Desde la fachada hasta sus salones, pasando por sus elaborados platos que evocan los sabores antiguos del campo magdalenense.
Ir a Guásimo es aprender sobre la cultura de la región, sobre ingredientes que ya conocemos pero puestos en un plato de manera magistral por su autor, quien se esmera en el más mínimo detalle para hacer que el comensal se sienta a gusto y quiera regresar. Mientras probaba de entrada un pulpo al estilo guásimo -plátano maduro quemado, berenjenas, lentejas crocantes y jarabe de fruta de temporada- me explicaban el por qué del nombre del restaurante. El guásimo es un fruto del bosque seco del caribe colombiano que se da mucho en el campo del departamento del Magdalena y que Fabián consumía frecuentemente de niño; esos recuerdos hicieron que se animara a darle nombre al local que desde 2018 dirige con gran acierto.
Mientras se ven obras de arte en las paredes, como grandes peces, en honor a la conservación de los océanos, se pueden disfrutar de cerca de 10 entradas, 13 platos fuertes como la panceta de cerdo (BBQ de guayaba agria, cremoso de ñame y aceite de orégano de patio), el salmón sobre croqueta de cayeye y vegetales salteados, o el pulpo con pesto de marañón sobre arroz cremoso de quesos madurados de Buritaca y balsámico de lulo, entre otros.
Pero el menú del restaurante es variable; como buen artista, al chef le gusta cambiar e innovar cada cierto tiempo, por lo que su carta cambia mínimo una vez al año, al igual que el ambiente y la decoración del lugar. Fabián está en una constante búsqueda de sabores únicos que le permitan seguirse posicionando como uno de los sitios más prestigiosos de la capital del Magdalena.
También es un muy buen conversador y se tomó el tiempo de explicarnos cual es su concepto y su visión sobre la gastronomía. Con un lenguaje enriquecedor, logra que los que lo escuchan viajen con él por un mundo de imágenes, de sabores, de anécdotas y de recuerdos de su infancia. Y por lo que vi, sus empleados también están capacitados para hacer sentir la misma sensación a cualquier visitante que entre al restaurante.
Guásimo sabores únicos está ubicado en el centro histórico, entre la bahía más linda de América y el parque de los novios (Cra 2 No 19-15). Es el lugar perfecto para una velada romántica, para probar algo diferente y para tener sensaciones gastronómicas nuevas. Todo esto de la mano de un verdadero artista que lucha por rescatar esos sabores que se están perdiendo las nuevas generaciones y que merecen ser retomadas. Tan impresionado quedé del sitio, que al siguiente día volví con una amiga que vive en Santa Marta, a la cual hace rato no veía y que al hablarle del restaurante me pidió que la llevara a conocerlo.
*Si quiere ver más sobre el restaurante busque en el video del minuto 8:43 a 11:16
https://www.youtube.com/watch?v=iX9VgSBOzI4&t=63s
This is exactly the moist culture I was looking for. I like the simplicity without the clutter of street food. And believe me, the street food I’m eating can be even better than what you’re eating in an expensive restaurant. https://krunkerio.io
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