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1. Léase o reléase el Acuerdo de Paz. Hágalo por partes, por capítulos, por momentos, pero hágalo. Léalo solo o acompañado. Si le gusta oír otras voces, escúchelo en spotify. Muy poquitos se han leído el acuerdo, conviértase en un privilegiado y dominador del tema. Es gratis.
2. En las redes sociales, en charlas con conocidos, en reuniones y donde encuentre la oportunidad, reafirme su convicción de respaldo por la implementación de los Acuerdos de Paz. Si no quiere, no hable de partidos pero hable de paz.
3. No difunda noticias falsas. Cuando se encuentre con mensajes cargados de calumnias y odio, denúncielos en las mismas redes sociales y evite su viralización. Es difícil ante la provocación e inmediatez de las redes, pero se puede.
4. Tómese un café con alguien que piense diferente a usted. Escuche serenamente sus razones para no apoyar el acuerdo de paz y respóndale con argumentos y cifras. Algo se le quedará.
5. Inscriba la cédula de ciudadanía en su consulado más cercano. En el exterior también se vota por elecciones atípicas como el Plebiscito por la Paz o la Consulta Anticorrupción. Sin cédula inscrita se queda por fuera de la democracia.
6. Participe conscientemente en todos los certámenes electorales que pueda. Vote para las elecciones locales en su lugar o país de residencia, vote para las elecciones de Congreso y Presidencia de Colombia. Como no puede votar para las elecciones municipales y departamentales de Colombia, invite y convenza como mínimo a dos personas (que sí lo puedan hacer) para que lo hagan. La paz también es participación.
7. Para las próximas elecciones regionales del 27 de octubre de 2019 en Colombia, invite a sus familiares, amigos y colegas para que no voten por a las candidaturas que están en contra de la implementación de los Acuerdos de Paz.
8. Únase a las causas ciudadanas que promueven plataformas defensoras del Acuerdo de Paz. Por ejemplo, “Defendamos La Paz” cuenta con un capítulo internacional y adelanta una campaña para recoger firmas (por Internet) que permitan darle las curules correspondientes a las víctimas de la guerra en el Congreso de la República de Colombia. Véase: http://www.por-las-victimas.bonde.org
9. Comprométase con un proceso de paz interior. Lea, si puede viaje, actívese con la naturaleza, aprenda de los niños y los abuelos, trascienda espiritualmente, medite, ore, fluya o haga lo que considere necesario para conectar en la misma sintonía lo que piensa, lo que dice y lo que hace.
10. Mantenga el ánimo en alto. No se desanime con los tropiezos del Acuerdo de Paz. La paz es un proceso de permanente construcción; sea consciente de ello, haga autocrítica e impida caer en el pesimismo coyuntural.
Nota: Si se le ocurren más acciones para respaldar la paz desde el exterior, por favor inclúyalas en el apartado de comentarios, envíelas a javierurrea@gmail.com o al WhatsApp +34 651 026 500. ¡Gracias!
Twitter @JavierUrreaC | Facebook Javier Urrea | Instagram @javierurreac
Da gusto leer articulos sensatos como este.
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Los únicos que están de acuerdo con ese engendro del tal acuerdo son quienes han sido beneficiados por él o aquellos que viven cómodos en otra parte como es este pobre diablo, el cual simplemente leyó el título de ese adefesio infernal y quedó obnubilado. Regrese y viva en el catatumbo o en el Cauca y después habla.
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Si alguien que vive en el exterior quiere apoyar el país, pues que venga a vivir acá y ayude desde adentro. Si se fue a vivir a otro lugar ya sea por dinero o calidad de vida, no tiene nada que hacer opinando acerca de lo que ocurre con el acuerdo fallido
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El que se humilla por obtener la paz, se queda con la humillacion y con la guerra… y si no me cree, preguntenle al chamberlain criollo JuHampa FARSantos!!!
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Los Colombianos, todos, queremos la paz. Los que no quieren la paz, son los que empunan las armas, secuestran ninas campesinas para violarlas y luego ponerlas de carne de canon y hacerlas abortar, los genocidas, los narco terroristas, y todos aquellos que de una forma u otra les hacen el juego. No importa de que color lo pinten, o como terjiversen el lenguaje; para que haya paz (y ha quedado demostrado una vez mas), se necesita que haya justica de verdad. Si hay impunidad, jamas habra justicia. Si no hay justicia, jamas habra paz. Lo de la Habana no fue una negociacion de paz, sino la rendicion del pais ante la guerrilla genocida Los medios y politicos mamertos hablan de democracia mientras le convenga a sus intereses, pero no la respetan pues no se respeto la voz del pueblo cuando se decidio por el NO en el referendum. Ahi no mas, ya no hubo justicia, pues se le nego al pueblo su libertad de eleccion y se le impuso algo contrario a su sentir. Los que negociaron la entrega del pais a la guerrilla, y todos sus aulicos y complices-compinches, deberian ser juzgados por traicion a la patria, eso si hubiera justicia, pero no la hay. Por eso, porque no hay justicia, no hay paz
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De q paz están hablando mamertos, la paz del narcotrfico
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Señor Urrea no le Quepa La Menor Duda que Todos Los Colombianos Sin Esepsion queremos La PAZ Pero Sin Impunidad.Yo Me Uno a La Campaña Para Inbitar A que Votemos por Los Candidatos que Quieren Al Pais no por los que desean Destruirlo.
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