Canadá cuenta con un sistema de salud público conocido como Medicare, que se financia principalmente de los impuestos, y es administrado por el Gobierno federal y las provincias. Este ofrece atención médica gratuita y accesible a todos los ciudadanos canadienses y residentes permanentes.
Pero, ¿realmente es tan accesible?
Tres capítulos atrás empecé a tocar un tema bastante controversial, desde que decidí compartir lo que ha sido mi maternidad alrededor del sistema de salud canadiense; experiencia que me ha llevado, a vivir en carne propia, una de las partes más frustrante y desafiante desde que llegué a Montreal.
Todos somos mundos e historias completamente diferentes y como dicen por ahí’’el que lo vive es quien lo siente’’. Puede que otras personas hayan corrido con mejor suerte que la mía, y yo de todo corazón los felicito y me alegra, pero en lo que a mí y a muchos respecta, no ha sido fácil.
Por supuesto, esto no se trata solo de mi caso, mi familia y mi experiencia personal, aquí en Quebec, se trata de alzar la voz por miles de personas que llevamos años esperando la asignación de un médico de familia, un procedimiento, o por los que han perdido a sus seres queridos en sala de urgencias, por falta de una atención médica que nunca llegó.
Y es que este sistema, que ha sido de orgullo nacional por décadas y referente ante el resto del mundo, hoy está en crisis y necesita un plan de rescate. No lo digo yo, lo dicen las noticias y el mismo Gobierno reconoce que no ha estado funcionando al nivel que los canadienses esperarían.
Por eso hoy vamos a hablar de lo bueno y lo malo de este sistema ¡Bienvenidos!
Lo bueno: sus pilares
Es universal: cubre a todos los ciudadanos canadienses, residentes permanentes y ciertos trabajadores temporales, que cuentan con acceso al sistema de salud social de la zona en la que viven, sin tener que preocuparse por el costo y sin importar su nivel de ingresos.
Es gratuito: cada mes, se deducen muchos impuestos del salario con el fin de tener acceso a una atención médica decente y de alta calidad.
No hay privilegios: lo que significa que tener un seguro médico de su país de origen o canadiense (privado), no dará ningún privilegio por encima de alguien que carezca de este.
Lo malo:
Listas de espera: Según un informe de la CBC (2022), más de 1 millón de canadienses en Ontario están actualmente en lista de espera para cirugías y procedimientos médicos, incluso antes de la pandemia. Por otro lado, 6 millones de canadienses no tienen un médico de familia, un tercio de esta población, lleva más de un año buscando, según investigación.
Otro informe publicado por el Fraser Institute en 2022 encontró que el tiempo de espera para recibir atención médica en Canadá alcanzó las 27,4 semanas en 2022, el más largo jamás registrado, y un 195 por ciento más que las 9,3 semanas que los canadienses esperaron en 1993. Sin contar los tiempos para recibir atención médica no urgente.
Esta situación, ya ha cobrado víctimas, incluso en salas de espera; como el reciente y lamentable caso de esta mujer de 37 años, en un hospital de Nueva Escocia, que esperó allí más de 7 horas para ser atendida
Escasez de médicos y enfermeras: Según Canadian Medical Association (CMA), la escasez de médicos y enfermeras es uno de los principales problemas. Además, la falta de camas en los hospitales y el aumento de los tiempos de espera para las cirugías.
En algunas áreas de Canadá, puede haber un solo médico de familia para toda una ciudad. Un médico en Wheatley, Ontario, según el informe, es responsable de 1.400 pacientes, los cuales quedarán perjudicados cuando se jubile a finales de este año y aún no hay un reemplazo en fila.
Envejecimiento de la población: Se espera que el número de canadienses mayores de 65 años aumente en un 68% para 2040, lo que significa que el sistema de salud deberá estar preparado para hacer frente a las necesidades de atención médica de esta población ¿Lo estará?
Dentro de esa población están también los médicos, que están próximos a jubilarse, haciendo que estas familias pasen automáticamente a las famosas listas de espera.
Médicos migrantes: La burocracia y el funcionamiento de las instituciones sanitarias canadienses complican la entrada de personal médico en el sistema público de salud canadiense, particularmente de aquellos que se graduaron en el extranjero, según un estudio llamado: El mito de Canadá: La exclusión de los médicos formados en el extranjero.
En pocas palabras, el sistema de salud canadiense tiene aspectos positivos como sus pilares. Para muchos canadienses, el sistema funciona y es de orgullo, otros, ya empiezan a percibirlo con preocupación. Es una realidad y no podemos tapar el sol con un dedo: este sistema en los últimos años enfrenta una crisis sin precedentes, la cual, a pesar de los esfuerzos del Gobierno, nadie sabe con certeza cómo va a salir de cuidados intensivos.
Por: Laura Urrego de Immiland
Fuentes:
https://www.cbc.ca/radio/checkup/is-canada-s-health-care-system-in-crisis-1.6549751
https://www.cbc.ca/news/canada/windsor/windsor-woman-lengthy-wait-specialist-referral-1.6525429
https://www.cbc.ca/news/canada/toronto/ontario-sugery-delays-pandemic-1.6354086
https://www.theglobeandmail.com/canada/article-family-doctors-canada-shortages/
https://healthadvocates.cma.ca/news/sounding-the-alarm-on-canadas-primary-care-crisis
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