Cuando se habla de medios de transporte por lo regular se debate sobre la necesidad de desestimular el carro y de promover el uso de la bicicleta y de los sistemas públicos y masivos, dejando de lado en las discusiones otros medios no menos importantes y de uso frecuente entre muchos ciudadanos.
Es el caso de la patineta y del monopatín, que generalmente se les asocia con la cultura urbana y callejera, con deporte y con desniveles para ensayar saltos y piruetas, pero también es una herramienta muy útil para recorrer distancias relativamente cortas.
La patineta es una alternativa de transporte que poco a poco cobra fuerza. Cada vez es más común que en muchos países los niños y los adolescentes vayan a sus colegios, cerca de casa, en una de ellas. Tampoco se hace raro ver a algunos oficinistas encorbatados a bordo de un monopatín o surfeando entre las olas de gente de las ciudades a bordo de un skate, como también se le conoce a la patineta.
Y es que el skate tiene muchas ventajas, pues aunque sus tamaños varían, en general se puede cargar con facilidad y no requiere de mucho espacio para guardarlo. Y por supuesto, su uso frecuente trae beneficios para la salud.
Andrey Ka es un joven parisino que se ha dado a la tarea de promover entre los chicos el uso del skate en lo que él denomina como Fitnboard, que es un juego de palabras de fitness y skateboard. La idea es que el usuario aproveche al máximo su patineta diseñada como herramienta para hacer ejercicios calisténicos, entrenamiento fitness, crossfit y rutinas de pilates para mejorar la coordinación, la resistencia, la flexibilidad y la capacidad cardiovascular.
En Medellín, Clara María Velásquez también está metida de lleno en esta sana dinámica y la promueve a través de su canal en Youtube Fit&Fun. “Es un tipo de ejercicio que involucra la patineta para llevarlo a cabo, mas no implica que debas saber montar en ella. Los ejercicios son de tipo funcional, es decir que compromete varios grupos musculares a la vez y aparte de tener como finalidad que te ejercites”.
Volviendo al uso del skate como medio de desplazamiento, podríamos continuar sumándole beneficios, como que se trata de una forma alternativa y no contaminante que permite avanzar al tiempo que se hace ejercicio, al igual que la bicicleta. Lo cual lo convierte en una herramienta “divertida”, como dice Andrey.
Por supuesto que una patineta o un monopatín no tienen la misma fuerza ni la velocidad que un vehículo, por eso el Código Nacional de Tránsito de Colombia contempla sanciones para los peatones que se movilicen por la calzada a bordo de una de ellas.
Las ciclorutas son las vías reservadas y recomendadas en Colombia para el tránsito exclusivo de bicicletas, monopatines, skates y otros medios impulsados por la fuerza humana; aunque en muchas ciudades con andenes amplios y parejos es factible ver a niños y adultos impulsándose a bordo de ellos.
Por supuesto que para el uso y disfrute de los skates como alternativa de transporte, es necesario que haya uniformidad en los andenes para evitar accidentes y comprensión de que estos son espacios públicos.
El skate está de moda y su uso se incorpora al paisaje urbano como medio para ir a estudiar, a trabajar o para hacer deporte, pero en torno a él también hay implícito un mensaje mucho más grande, que gira en torno a un estilo de vida sano y divertido, libre de autos.
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