"El póquer del mentiroso tenía mucho en común con la colocación de bonos"
Michael Lewis
Interbolsa incurrió en prácticas ilegales desde 1999 pero sólo a fines de 2003 el ministerio de hacienda tomó cartas en el asunto y sancionó a ésta firma comisionista con un cierre de 3 días, entre el 22 y el 24 de diciembre. Como regalo de navidad, el mismo día el ministerio le renovó la licencia para operar como "creador de mercado" durante el siguiente año.
El despacho ministerial lo ocupaba entonces Alberto Carrasquilla, abanderado de la "confianza inversionista" quien ahora sale -con el cinismo propio de los de su clase- a decir que el lío de Interbolsa no fue nada y que "la gente confía en el sistema privado y en su capacidad de absorber problemas de relativo calado".
Ronda de tahúres
Miente el ex-ministro uribista. Como mienten su patrón, su asesor de entonces (quien luego fue directivo de Interbolsa y luego ministro de hacienda -impedido- y siempre favorecedor de sus amigos) y como mienten casi inevitablemente los paladines neo-liberales.
Aquí está la respuesta a quienes se preguntan porqué brillantes ejecutivos optan por sacrificar jugosos honorarios y dividendos, para irse a ocupar altos cargos gubernamentales: lo importante no es la silla que ocupan, sino lo que juegan debajo de la mesa.
Cierto es que el ex-ministro de hacienda Juan Carlos Echeverry se declaró impedido de intervenir en lo que tuviese que ver con Interbolsa, por haber sido directivo de esa firma hasta el día antes de su posesión.
Sin embargo, muchos piensan que jamás debió designarse como ministro de hacienda alguien que antes, en condición de asesor de Carrasquilla, fue complaciente con la empresa que después lo contrató y que, sin solución de continuidad, debería haber supervigilado en su nueva condición de ministro del ramo.
Sarta de falsedades
En lo de los impedimentos hay mucho embeleco y poca claridad.
El ex-director de crédito público de min-hacienda (quien entregó la licencia que autoriza a Interbolsa a comprar bonos del gobierno para luego ofrecerlos en bolsa, en vísperas de nochebuena de 2003 cuando la comisionista estaba sancionada por fraude en la solicitud de dicha licencia), es hoy vicepresidente de Bancolombia, entidad que heredó ese negocio de Interbolsa hace 3 meses.
Dicho personaje alega -en defensa de la entrega que hizo de la mencionada aprobación-, que la solicitud cumplía los requisitos. Miente. Uno por lo menos no se cumplía en realidad: Interbolsa mintió pues declaró tener un capital que no tenía. Y el funcionario que debía verificar la veracidad del cumplimiento de los requisitos omitió hacerlo.
Mentirosos también quienes, entre 1999 y 2003, certificaron, mensualmente, como verdadera la declaración patrimonial de Interbolsa entre ellos el, señalado por el periodista Alberto Donadio, ex-director encargado de crédito público, quien luego pasó a ser directivo de Interbolsa y luego acreedor del fondo Premium de...Interbolsa.
Cuentos de exportación
El estado colombiano desconoce la cantidad real de carbón que exportan Cerrejón y la Drummond.
Debería conocerla con exactitud, pues esa cifra determina el monto de los recaudos por concepto de regalías. Mejor dicho, no se sabe cuánto le queda al país, en plata blanca, por cuenta del despojo.
Esos y otros datos los suministra, adivínenlo, el
concesionario. Y, como el estado no tiene personal capacitado y suficiente para
adelantar dichos controles, las empresas orden y pagan las auditorías que de esa forma pierden independencia y credibilidad.
Miente, además, el estado compinche cuando permite que las trampas de las multinacionales socaven la vida, honra y bienes de los nacionales que las autoridades juran defender. Los yacimientos mineros son parte importante de la riqueza nacional.
Desde luego, también mienten los explotadores y exportadores de minerales en las cifras de lo que sacan y venden, para evadir impuestos y regalías, en el cumplimiento de los requisitos ambientales y en la llamada "responsabilidad social" que no es otra cosa que un juego de espejos para mejorar "la imagen", confabular con periodistas y funcionarios venales y engañar a la opinión ciudadana.
Diestros tahúres y jugadores mañosos se citan a un lado de la pista del circo para alardear de sus trucos y reírse del chiste aquel de la "confianza inversionista". Igual lo hacen todavía los corredores de Wall Street para jugar el póquer del mentiroso.
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Poética de la verdad
Que mejor contraste con los expertos jugadores de la mentira, que la carta de Vicenta Siosi Pino, wayuu del clan Apshana, al presidente Santos pidiendole que no apruebe el "traslado" del río Ranchería en territorio ancestral de esa etnia guajira, más que una súplica es un conmovedor canto que merece el respaldo de todos quienes amamos la vida en esta tierra.
Fotos tomadas de: http://www.tayrona.org
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