Ingresa o regístrate acá para seguir este blog.

Cristian Torres Rodríguez (2)

Por: Cristian Torres Rodríguez

Es imposible demostrar una cifra certera de cuántos venezolanos residen en Colombia o de cuántos cruzan la frontera de manera temporal. Las cifras son un disparate, cambiantes a diario y poco creíbles por la debilidad del Estado colombiano y por las prácticas de dudosa transparencia de los oficiales de la República Bolivariana de Venezuela.

Sin embargo, aquí van a corte del año 2017 según Migración Colombia. Dicen que 796.000 venezolanos sellaron su pasaporte para ingresar al país, de los cuales 552.000 se quedaron de manera legal y 374.000 sin la documentación exigida por las autoridades colombianas y aquí, el primer llamado para bajarle al arribismo santanderista, no les llame “venezolanos ilegales”. Como ven, las cifras parecen pocas respecto de la cantidad de venezolanos que se ven en TransMilenio, en el Parque Santander de Cúcuta o en el Paseo Bolívar de Barranquilla.

Para las autoridades binacionales, controlar los 2.219 kilómetros de frontera embellecidas por los accidentes geográficos que de norte a sur tienen el desierto guajiro, la serranía del Perijá, los cauces de los ríos Arauca y Orinoco, sumado a la extensa selva amazónica, hacen que por cualquiera de los 6 departamentos colombianos y 4 estados venezolanos que se tocan entre sí, se adecúen agrestes caminos de herradura que ya no solo sirven de paso para los guerrilleros del ELN sino también para los venezolanos de bien.

Como es sabido, el régimen de Nicolás Maduro diseñado para enriquecer a los venezolanos del Palacio de Miraflores, contrasta con la mayoría de la población del país bolivariano que se muere por conseguir alimentos, productos básicos, medicamentos y oportunidades, por eso, enhorabuena a las autoridades colombianas que los reciben, pero aún no es suficiente. No hay políticas sólidas para acogerlos, ni suficiente empleo. Al gobierno colombiano la crisis de Venezuela le madrugó y lo cogió con los pantalones abajo.

Entonces, mientras los gobiernos nacional, departamentales, municipales y distritales resuelven sus vericuetos de hambruna electoral, a los colombianos de a pie se les invita a dejar la xenofobia y esa odiosa actitud de mirar por encima del hombro a los hijos de los países vecinos.

Colombia en general no se ha dado cuenta que el éxodo venezolano es una oportunidad ¡He ahí un reto!, Más venezolanos en Colombia son más mano de obra, más competitividad, más producción, más posibilidades de enriquecimiento económico, social y cultural, más médicos, más profesores, más emprendedores, más gente con ganas de trabajar.

A Colombia se le olvidó que Estados Unidos, ejemplo al que tanto sigue, se construyó a punta de inmigrantes y desconoce que incluso hay empresarios venezolanos que generan empleo no solo a sus compatriotas, sino también a los colombianos, como es el caso de las súper droguerías Farmatodo y Locatel, el canal de televisión por suscripción Cable Noticias, la entidad financiera Bancar, las productoras de alimentos Polar y Congrupo, la remodeladora de interiores Prosein, la fábrica de maquillaje Drocosca y las innumerables areperías y deliciosos restaurantes que alimentan y contribuyen a la oferta gastronómica.

Según el Banco de la República, estas empresas de bandera venezolana en su mejor momento, que fue el año 2014, llegaron a invertir en Colombia más de 114 Millones de Dólares y en 2017, la mitad, apenas 54 Millones de Dólares, ¡Y eso que ya no es Venezuela Saudita! ¿Entonces Colombia se va a dar el lujo de despreciar venezolanos?

Si el Gobierno Nacional diseña y fortalece una política seria y menos usurera desde el punto de vista tributario, habrá más oportunidad para todos, tanto colombianos como venezolanos y el libertador Simón Bolívar estaría orgulloso de verdad.

Las noticias dependen desde el punto de vista que se les mire, si usted solo le pone atención a los titulares de prensa que señalan a unos pocos venezolanos de delincuentes, imagínese lo que siente un colombiano de bien que está en Europa o Norte América y que lo generalicen de narcotraficante. La xenofobia solo embrutece y no deja ver las oportunidades, así que, venezolano, siga que esta es su casa.

Twitter: @cdtrnews

Compartir post