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Imagen: AFP PHOTO/JUNG YEON-JE

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El alto precio que experimenta el dólar en Colombia es ocasionado por factores externos como la desaceleración de la economía china, el desplome del petróleo en los mercados internacionales y la sobreoferta mundial de materias primas. Asimismo, también existen factores internos que contribuyen al alto precio de esa moneda como es la dependencia de la economía colombiana del petróleo y del carbón, la disminución de la inversión extranjera directa y la fuga de capitales.

No obstante, hay otros factores que no se pueden desconocer como es la alta especulación de las divisas, donde un pequeño sector se beneficia en perjuicio de las mayorías. Existe un constante vaivén entre los exportadores y los importadores en el cual, los consumidores no tienen voz ni voto a pesar de verse constantemente afectados por el mercado cambiario, razón por la cual urge la intervención del Banco de la República.

Factores externos

*La desaceleración de la economía china: Debido a factores como la aparición de coronavirus y la guerra comercial con Estados Unidos, la economía china se está desacelerando abruptamente, ocasionando el desplome de las principales bolsas de valores y denotando claramente, que el comercio internacional depende de ese país. Algo que además, genera una gran incertidumbre al tenerse el riesgo de que el mundo entre en una gran depresión.

*El desplome del petróleo en los mercados internacionales: El bajo precio del petróleo generado por la sobreoferta del mercado, tiene un efecto inverso en el precio del dólar. Esto ocasiona que ingresen menos dólares por su venta a pesar de que Colombia produce un millón de barriles diarios que equivalen a un tercio de lo que producía Venezuela, el país con las mayores reservas del mundo. Por efecto, se reduce el presupuesto nacional y por tanto, habrán menos regalías para las regiones.

*La sobreoferta de materias primas: Esto ocasiona que los principales socios comerciales de Colombia como es EE.UU, Europa y algunos países asiáticos; tengan numerosos proveedores con menores costos y como efecto de esto, se reduzcan paulatinamente las exportaciones colombianas de commodities hacia dichos destinos. Por consiguiente, también ingresan menos divisas por ese concepto y se crea una desaceleración terciaria a nivel interno.

Factores internos

*La dependencia de la economía colombiana del petróleo y del carbón: Al depender de estos dos commodities, la economía nacional está sujeta a los acontecimientos internacionales como los que están ocurriendo en este momento. Ello confirma que es un grave error depender de la exportación de energías fósiles, que además es un gravísimo error implementar el fracking a costa del agua con el agravante de generar sismos y que es urgente que el país se enfoque en otro tipo de actividades económicas como podría ser el turismo, la agricultura, el comercio, la oferta de servicios, la industria digital y las actividades manufactureras (entre otras).

*La disminución de la inversión extranjera directa: Esta ha disminuido por la incertidumbre respecto al proceso de paz firmado entre el Estado y la insurgencia y por la mala relación de Colombia con Venezuela. En otras palabras, la inversión que llegó al país atraída por el tema de la paz, se está yendo por culpa de la beligerancia del actual gobierno ya que ningún empresario arriesgará su capital en un país que tiene el riesgo de entrar en guerra. Como consecuencia, muchos proyectos empresariales se han estancado aumentando así el desempleo y la pobreza extrema. Algo lamentable, pues a pesar de tal retroceso, Colombia sigue siendo considerada como una de las economías más importantes de América Latina.

*La fuga de capitales: Otro de los fenómenos que ha experimentado el país en los últimos años es la entrada masiva de capital golondrina, dinero proveniente de fondos internacionales, algunos catalogados como fondos buitre, los cuales llegaron a colocar valores en el sistema financiero colombiano para obtener altos intereses en el corto tiempo. No obstante, es claro que el capital golondrina no se puede considerar inversión extranjera pues no genera empleo, no paga impuestos y se va tan pronto haya un ligero cambio en el mercado. Además, gran parte del sector financiero se soporta en el ingreso petrolero de los países, razón por la cual también se derrumbará cuando dicho ingreso disminuya como está sucediendo en este momento.

Otros factores

Obviamente existen otros factores que contribuyen al alza del dólar como es la rivalidad comercial entre China y EE.UU, la devaluación del yuan, la imposición de nuevos aranceles por parte de EE.UU. a Europa, la leve desaceleración de la economía europea y el efecto negativo que tendrá el brexit en el Reino Unido. Asimismo, las tensiones de Estados Unidos y de Arabia Saudita con Irán, la larga guerra en Siria, el conflicto del Estado de Palestina con Israel y los problemas xenófobos que hay en la frontera de Grecia y Turquía.

En cuanto a la alta especulación que existe en el mercado cambiario, algunos exportadores están satisfechos por el alza del dólar ya que ven multiplicados sus ingresos cuando se convierten a pesos. Por el contrario, los importadores están muy insatisfechos ya que tienen que pagar más por traer sus productos y están vendiendo menos debido a los altos precios que ya empiezan a percibir los consumidores.

El mercado cambiario siempre actúa con gran especulación como si se tratara de un juego de monopolio sin tener en cuenta el bienestar de los consumidores. Existirán algunos factores que pueden ser racionales hasta cierto punto para justificar el incremento del dólar, pero hay muchos otros que son una incógnita y que no están ligados al mercado.

Por consiguiente, el Banco de la República debería intervenir lo antes posible para evitar que el dólar siga subiendo sin freno. Alrededor del mundo, los bancos centrales suelen tomar medidas para evitar el descalabro de sus economías. Por ejemplo, en el año 2016, el Banco Central Europeo compró la deuda soberana de los países miembro al tiempo que les inyectó 60.000 millones de euros mensuales.

Otro aspecto que se debe analizar es que a Estados Unidos no le conviene que el dólar se fortalezca de forma tan exponencial ya que a mediano plazo, será contraproducente. Si los demás países no pueden sostener una devaluación tan especulativa de sus monedas, dejarán de importar y por tanto, de consumir productos estadounidenses. Algo que sería aprovechado rápidamente por otras potencias como China, Rusia y la misma Unión Europea. Además, un alza tan exponencial del dólar, ocasionará que muchos países empiecen a negociar y a guardar sus reservas internacionales en otras monedas.

Como EE.UU. es el dueño de las máquinas que hacen los dólares, nuestros países deberían buscar alternativas para no depender de esa moneda la cual muchas veces, no cuenta con el respaldo que se piensa. La emisión de dinero y posterior colocación en el exterior es un fenómeno que no se ha investigado lo suficiente, pero que se debería tener en cuenta a la hora de calificar la conveniencia de cierta supuesta inversión extranjera, especialmente la que llega a inundar el sector financiero y otros sectores estratégicos de la economía.

Tal vez América Latina debería empezar a contemplar la implementación de una moneda regional para no depender del dólar. Una moneda única facilitaría las transacciones internacionales a la vez que le daría mayor poder de negociación a nuestros países, especialmente frente a bloques como el de EE.UU. y Europa. Sin duda alguna, este sería un gran paso hacia la soberanía económica que tanto se anhela.

En el pasado existió una iniciativa que nuevamente deberían estudiar los diferentes gobiernos de la región como fue el Sistema Unitario de Compensación Regional más conocido como SUCRE. Y aunque se trató de un proyecto de unidad de cuenta y de valor y no de una moneda con organismo emisor de piezas y billetes, podría ser el principio de una poderosa divisa que acabaría con la dependencia del dólar y que le daría mayor estabilidad a las economías latinoamericanas.

Es ingenuo pensar que el alto precio del dólar hará crecer la economía colombiana ya que las exportaciones sólo benefician a un reducido número de empresarios. Además, el alto precio del dólar desacelerará el consumo interno ya que los precios de los productos importados aumentarán. También hay que tener en cuenta que el SMLV es precario y estático y que solamente se incrementa una vez al año, lo que impedirá que aumente el consumo.

Asimismo, no se puede desconocer que el alto precio del dólar ocasiona que la deuda externa aumente exponencialmente, lo que la hará impagable y lo que podrá tener como consecuencia la imposición de nuevos impuestos tipo 4×1000. Por todo lo anterior, se reitera que es urgente que el Banco de la República intervenga ya que las ganancias de las exportaciones sólo benefician a una pequeña minoría, mientras que el aumento de los precios de los productos y de la deuda externa, perjudica a todos los colombianos.

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