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Que son perezosos para trabajar, que se van muy rápido de las empresas, que no aguantan un reclamo, que no sirven para nada. Que son arrogantes y soberbios, que solo quieren una buena vida.
Estos son tan solo algunos de los reproches que les hacen a los millennials, como se ha llamado a la generación de quienes hoy tienen entre 20 y 35 años de edad.
¿Qué sucedería si en vez de atacarlos, decidiéramos escucharlos? Creo que tienen mucho para enseñarnos, tal vez no queremos prestarles atención porque de pronto descubrimos que la vida que les mostramos no es real o que tal vez la forma en que hemos llevado la nuestra es una equivocación.
Los millennials ya no quieren necesariamente llegar a una empresa, quedarse por años, lograr un cargo directivo y ahorrar una pensión para la vejez. No. Ellos quieren encontrarle un sentido a lo que hacen, buscan un compromiso emocional, que ellos y su empresa agreguen valor y con frecuencia se van de sus trabajos porque no encuentran respuestas a estas búsquedas. ¿No es acaso muy respetable que quien trabaje le encuentre un sentido a lo que hace y que su compromiso no sea con un cargo, una marca, una empresa, sino con una razón de ser, un aporte a su vida y a la comunidad?
Tampoco están de acuerdo con los sueldos que ganan. Todos quisiéramos recibir salarios justos y a ellos los educamos diciéndoles que el conocimiento académico lo era todo, que debían se profesionales, tener máster, doctorado y que un postdoctorado tampoco les caería mal. ¿No les dijimos que con todo ese estudio serían exitosos y conquistarían el mundo? Pues bien, allí lo están cobrando, porque al parecer no les dijimos toda la verdad, no les contamos que las experiencias de la vida también valen como conocimiento.
Los jefes los critican por arrogantes y soberbios. Claro, con tanto estudio ellos consideran que forman parte del exclusivo círculo del conocimiento y que en cambio las generaciones anteriores no, por eso llegan a las empresas a decir que ellos sí saben y que los saben todo.
Muchos cambian rápido de puesto para ganar más o salen a montar sus propios emprendimientos con la seguridad que les da la tecnología y porque entienden que las empresas tradicionales ya no son todo lo que ofrece el mercado.
Les insistimos en que lo único que valía la pena era ser felices fácilmente y nunca les enseñamos que el esfuerzo y superar obstáculos también generan felicidad, nunca les contamos que los resultados de la constancia y la persistencia nos hacen sentir valiosos, sonreír y querernos más.
Muchos crecieron sin sus padres siempre metidos en oficinas y en el trabajo, sin tiempo para disfrutar, para estar con amigos o viajar, para lanzarse al mundo y aventurar un poco, porque creían que solo el esfuerzo y el trabajo duro les daba el derecho a disfrutar, pero eso sí, únicamente durante la vejez.
Que se la pasan viajando y recorriendo el mundo, que solo quieren vacaciones más largas y días laborales más cortos. Pues claro, ¿no es eso lo que quisiéramos muchos? Tener la libertad para tomar un avión cuando nos dé la gana, aprender a viajar con poca plata, aprovechar las nuevas opciones de turismo que ofrecen la tecnología y la globalización.
Ahora predicamos a más no poder que la calidad de vida es importante, que conocerse a sí mismo es fundamental, que pasar tiempo con los demás es definitivo y resulta que estos jóvenes quieren poner en práctica lo que les estamos diciendo y lo que hacemos es censurarlos y reprocharles. Tal vez más bien les tengamos envidia.
Tan solo creo que, como todas las generaciones, los millennials no quieren repetir los errores de sus padres y eso es lo que están haciendo. Que no queramos mirar de frente lo que nosotros hicimos, eso es asunto nuestro y no de ellos.
Es simple, son producto de la generación “yo quiero que usted tenga lo que yo no pude” o “yo no quiero que cometa los mismos errores que yo”. Por eso quieren todo masticado, prima la vanidad sobre la esencia y la aprobación de los demás para ganar la suya.
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estos chicos tienen la ventaja de la creatividad y la tecnologia ,pero como personas son vacias,depresivas ,nada les parece y por que creen que se suicidad tanto,mucha ciencia poco espiritu.
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Quienes critican… me imagino lo viejos que son… o el alma tan arrugada y pauperrima que tienen, den paso a lo nuevo y adaptense; ustedes señores “arrugados” ya no son el futuro las cosas cambian y el tiempo de vanagloriarse a si mismos paso… como algún día nos pasara a nosotros.
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Hago parte de esa generación y para nada creo que la tierra sea plana como dijo un bobazo mas abajo… al contrario, los millennials y las nuevas generaciones están mas identificados y se sienten mas realizados con la ciencia, con lo tangible y verificable, con lo real, y como sea, queremos derribar viejos paradigmas como las religiones y creencias caducas y absurdas que no son sino el resultado de la ignorancia y el miedo que hace parte de los nacidos de los 70 para abajo… he hablado con gente de esas antiguas generaciones que hoy tienen entre 45 y 55 años y es increíble lo inseguros que son , viven llenos de miedo y literalmente cagados… nosotros nacimos en un mundo libre, a nosotros nunca se nos ha impuesto nada a diferencia de ellos, nosotros no le agachamos la cabeza a nadie y eso no es arrogancia, a eso se le llama dignidad…
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patriota1 no se su edad pero es lo mas coherente que he podido leer de alguien se nota el analisis de consciencia que ha hecho y por esas expresiones escritas aplaudo la valia de su expresion
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Como mileniam, cuantas veces me ha tocado escuchar, — sigámoslo haciendo así que así me enseñaron — sigámoslo haciendo así, que así nos ha funcionado — háganoslo así, que así me dijeron que lo hagamos — espera le pregunto a papi jefe haber como lo quiere él — 2 o 3 años después quiebran por no saber escuchar el mercado, por no saber ser humildes y escuchar.
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Es una generación bastante critica frente a las cosas, tiene ideas bastante ingeniosas.
El conflicto radica en que las personas no pertenecientes a esta generación son personas que han crecido con el “Hágalo así”, en vez de “podríamos hacerlo así”.
He trabajado con estos chicos, y la verdad cada día me asombra mas como pueden encontrar soluciones rápidas, sencillas y sin tanto proceso. Lamentablemente muchas personas no aprecian este talento, cierran las puertas a nuevas ideas, “Dando dosis de realidad ó dosis de egoísmos”. Debemos tener en cuenta que ellos fueron una generación que aprendieron por si solos el uso de muchas cosas, en cambio nosotros somos de la generación antigua, que nos basamos en procesos, en el se hace así y ya.
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Como mileniam, cuantas veces me ha tocado escuchar, <<>>, … 2 o 3 años después quiebran por no saber el mercado, por no saber ser humildes y escuchar.
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Nuestros padres vivieron en un mundo donde tenían que agacharle la cabeza a todo el mundo, un mundo donde la gente estaba tan aburrida de los godos, que tocaba irse al monte a echar bala para hacerles temblar su absurdo poder ganado a punta de egoísmo, sangre, trampa, exclusión social. Los mileneans primero que todo son personas que nacieron en un mundo libre, en un mundo sin mezquindad, para los jefes actuales es difícil tratar con un Milenianm, claro. ellos no tuvieron adolescencia, estos jefes hechos a la antigua nunca tuvieron el carácter de cogerle la correa a la mama y decirle, si me vuelve a pegar llamo a la policía y la denuncio por maltrato infantil. Los milenians son más inteligentes, más libres, tienen menois miedos, los mileniams son más gente que esos petardos del pasado. A los jefes de ahora tienen que entender que si quieren a un mileniam trabajando feliz y siendo feliz, tienen que ganarse su respeto. Y ese respeto se gana, no se hurta.
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Sus argumentos tienen un poético valor retórico pero en la realidad práctica no funcionan, por desgracia. Vienen de padres amigos antes que padres, encuentran que todo es negociable, estudian pero no aprenden y se conforman con apenas aprobar, no les preocupa el otro y tanto así que no asumen comprimisos sentimentales verdaderos, son exhibicionistas y egomaníacos e infantiles, no producen nada tangible pero si son críticos y evaluadores, infieles por no comprometerse y aves de paso.
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Pues estos son en su gran mayoria una de las peores generaciones que me ha tocado lidiar.
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Sus razonamientos son coherentes, pero se nota que usted no ha tenido que trabajar con ninguno! El peor defecto de los millenials es que una vez se les escucha, entonces se creen con derecho a la atencion exclusiva y sin derecho a replicarles nada, asi sea con argumentos: sus opiniones valen mas que cualquier elemento comprobado, con decir que su generacion es de las que apoya las teorias de la tierra plana y demas cuentos conspiranoicos. Si algun dia le toca trabajar con esta generacion, le recomiendo primero aterrizarlos, darles su dosis de realidad y ahi si valoarlos. Antes, es solo engrasarles el ego.
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