¡Por fin! Restaurante Mercagán Parrilla llegó a Bogotá

Para los santandereanos, hablar de Mercagán Parrilla es bastante familiar ya que se trata de un negocio que data de 1999 en el que los ganaderos de Bucaramanga, y en general de todo el departamento, decidieron ofrecer a sus paisanos los mejores cortes de carne que tiene la región. Cuando se visita la ciudad bonita, sus habitantes no dudan en llevarlo a uno a almorzar allá, y la verdad es que es una excelente recomendación porque su carta ofrece variedad, calidad y abundancia.

Pues bueno, el pasado primero de octubre recibí la noticia de que en el nuevo centro comercial El Edén (avenida Boyacá con calle 13 costado oriental, Alsacia), Mercagán abrió el primer punto de venta en la Capital de la República, por lo que no dudé en ir a visitarlos.

Restaurante Mercagán. Foto: Hugo Leonardo Valenzuela

Chatas; punta de anca; lomo fino; la tradicional carne oreada, frita o asada; sobrebarriga; asado de tira; mollejas; chunchullo frito o asado; ubre; morrillo; típico santandereano (chatas, oreada, sobrebarriga y chorizo coctel) en lo que a carne de res se refiere. Cabrito; pechuga de pollo a la parrilla; un pincho que se sale del plato de lo grande que es; hamburguesas de gran tamaño con carne cien por ciento res; la mejor sopa de patacón que me he comido en mucho tiempo, y hasta una gigante ensalada de aguacate para acompañar… Todo en Mercágan Parrilla es grande, así que a uno no le duele pagar la cuenta porque ellos son generosos en las porciones.

Restaurante Mercagán. Foto: Restaurante Mercagán. Foto: Hugo Leonardo Valenzuela

Pero no solo es cantidad, el sabor de sus carnes maduradas es inigualable. Y para garantizar que la calidad sea la misma que en sus restaurantes en Bucaramanga, se trajeron a cuatro personas de allá para entrenar a los demás empleados que atienden en Bogotá (eso me contó el administrador ayer). Eso es importante porque el comensal puede pedir las tradicionales yuquitas que siempre le sirven para acompañar las veces que quiera, con ají y guacamole mientras se asa la carne que usted escogió. Aunque ofrecen bebidas variadas como gaseosas, tés, cervezas, aguas, limonadas de coco, siempre lo mejor para la sed (y es muy tradicional en Santander) será la limonada de panela servida en un vaso como de medio litro.

Aplaudo que los ganaderos de Santander por fin se hubieran fijado en la capital y decidieran extender sus puntos de venta por todo el país. Ya no es necesario pegarse el viaje hasta la ciudad bonita, ahora los ‘cachacos’ podemos disfrutar de las delicias del Restaurante Mercagán al que recomiendo ampliamente pues llevo 5 años probando y disfrutando de sus productos.

¡En hora buena por Bogotá! y que sigan llegando otras marcas gastronómicas de esa región, que tan buena sazón tiene.