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Nunca antes Volvo se había acercado tanto a Mercedes y BMW en los sedanes de tamaño mediano. La suntuosa cabina y abundantes asistencias a la conducción respaldan un gratificante manejo
Lo primero que se siente al abrir la puerta del nuevo S60 es su peso, justo mas no incómodo, como un abrebocas de lo que sigue en cuanto a calidad. Una pantalla digital apagada, que al dar paso a la corriente aloja velocímetro y tacómetro circulares sobre un timón que con el inconfundible logo y tamaño perfecto, era el timón ideal para los fans de Volvo que con seguridad lo imaginaban así hace 10 años.
Foto: Fernando Santos
La pantalla táctil central sobre la consola, muy avanzada, vertical, con 9 pulgadas en su diagonal, es una pieza protagonista en un tablero gris perfectamente rematado con piezas de aluminio y madera a lo ancho, que se replican en todo el recorrido de la consola, donde el aluminio acanalado cubre casi toda la superficie en la original perilla que reemplaza el botón para prender o apagar el motor, y en la ruedita giratoria que selecciona los modos de conducción.
Foto: Fernando Santos
Lo descrito se resume en una vanguardista y original elegancia, terminados muy cuidados con los parales forrados en una fina tela, un sunroof panorámico alegrando la cabina, y las sillas en cuero por cierto muy cómodas. Volvo es recordada por esto, y aunque al principio las sentí anchas en el respaldo, como sin soporte, me sentí cómodo pronto, y la verdad es que la sensación de cansancio tras largas jornadas es menor que en el promedio de vehículos probados en tantos años.
La pantalla central desde donde se comanda casi todo (Volvo llama a su interfaz ‘Sensus’), requiere bastante más tiempo del habitual para entenderla y operar con rapidez lo esencial como radio, teléfono, aire acondicionado (de 2 zonas) y otras funciones y útiles aplicaciones adicionales que se van encontrando con el paso de los kilómetros, algo que venía comentando la prensa especializada de todo el mundo. Hubo muchas quejas de funcionamiento especialmente en las camionetas XC90, por la lentitud al oprimir un comando, por operaciones mal ejecutadas, e incluso casos de pantallas que se bloqueaban.
Foto: Fernando Santos
El software se ha venido actualizando e incluso sé que en las más recientes camionetas XC60 se ha instalado un procesador un 50% más rápido. En la prueba de este auto me funcionó perfectamente, e incluso en algunos momentos la operaba con bastante frecuencia a propósito (hasta cerrando y abriendo el switch), y nunca hubo lentitud, ni operaciones erráticas en ninguna circunstancia y cuando ya me familiaricé, llegué a disfrutarla por su funcionalidad.
Los puestos de atrás son una delicia. Las sillas acogen perfectamente al pasajero derecho e izquierdo (la sensación es de estar abrazado), la posición sobre el piso es baja, pero con amplia visibilidad hacia adelante, y sin la predominante sensación de claustrofobia de muchos vehículos, donde la ventanilla lateral empieza casi a la altura de los hombros.
Aún se ven aquellos Volvos de líneas cuadradas con 2 décadas o más en sus espaldas que generan odios o amores, pero en definitiva, con gran personalidad. El anterior S60 se hizo con líneas suaves, diferentes, que en su momento entregaron un auto elegante, distinto, pero menos llamativo y ostentoso que sus rivales germanos, lo que terminó inclinando la balanza hacia el otro extremo: el tiempo no ha pasado en vano y se ve desactualizado, no es intemporal, como sí lo son, hasta hoy, el Mercedes clase C o su eterno rival, el serie 3 de BMW.
Un volvo en todo el sentido del término. Foto, Fernando Santos
¿Cómo se ve por fuera? Hermoso. Las proporciones, con un plano para el motor y guardabarro delantero largo, y una línea de cintura recta que se levanta al final de la ventana trasera para unirse con el techo en el amplio paral C, dejando un ”deck” o tapa de baúl corto, resulta en un diseño posmoderno que recuerda al legendario P 1800 de la serie El Santo. Las ranuras circundantes en los 4 pasos de rueda, las puertas cóncavas abajo y las llantas traseras adelantadas dejando un amplio voladizo, acentúan la percepción.
Desde el principio me sorprendió la calidad de marcha, no solo porque las suspensiones asimilan casi todo tipo de imperfecciones perfectamente, sino que la versión T4 analizada (por ahora Volvo la acompañará únicamente del T8 híbrido) se trajo con llantas 235 serie 40 en rines 19, lo que a simple vista deja un perfil de llanta entre los más bajos que se puede tener con ese tamaño de rin, lo que contribuye a la presencia, pero muy poco al confort. No es ese el caso, el S60 es casi perfecto en impactar al mínimo la cabina, con tan poco caucho sobre la vía.
Casi, porque cuando se exigen las suspensiones, cuando se extienden, pero especialmente cuando se comprimen casi al máximo, se llega a los topes cuando no se espera algo así. La calidad de la amortiguación no está al nivel de un Mercedes C, no porque sea ruidoso ni mucho menos. Es una cuestión de percepción, el movimiento de los elementos no es tan refinado y aunque el auto es muy sólido, no se siente como el que más; y buscando la perfección de los más silenciosos a bordo, no saca un 9 (no existe el que saca 10) que baja a 8 solamente por el mínimo ruido de las llantas.
Luces traseras que recuerdan a sus ancestros. Foto: Fernando Santos.
El nuevo Volvo S60 es un auto divertido, ¿quién hubiera pensado? El manejo es muy bueno para un carro con la marcha tan suave en donde la generosa distancia entre ejes de 2,87 metros tiene protagonismo para el aplomo en rectas (y el vasto espacio para las piernas atrás), pero no supone actitudes lentas al girar el timón en carreteras de curvas cerradas; al contrario, gira muy rápido y se inscribe con sorprendente rapidez y precisión para hacernos pensar que vamos rápido en un auto mucho menos largo y pesado que los 4,76 metros y cerca de 1.7 toneladas que marca.
No recuerda que es tracción delantera, pues es más bien neutro, e inclusive al liberar el acelerador en pleno viraje, la cola se asoma un poquito, apenas para ayudar a marcar la curva como cuando se acelera de más en un tracción trasera. Además, la amortiguación controla muy bien cualquier atisbo de balanceo.
¿Por qué más es divertido de manejar? Por el motor. Entre más lo escuchamos, más ganas dan de dar rienda suelta a los caballos. Suena como si fuera más grande y tuviera 2 cilindros más, cuando en realidad es un 2 litros repartidos en 4 cilindros de la familia Drive – E con un turbo que hace pasar los 190 caballos y el torque de 30,6 kgm que produce vía una caja de 8 automática (fabricada por el proveedor japonés Aisin). La respuesta no es tan rápida en bajas rpm, hay que esperar a las 2500 – 3000 para que ”despegue” -literalmente- o mejor dicho, para que entregue todo el abundante poder. Su comportamiento mecánico trajo a la memoria al buen hatchback de BMW, el 116i.
Así son la pantalla, los instrumentos y la disposición de mandos en el S60. Elegante discreción. Foto: Fernando Santos
El acelerador a fondo impulsa muy bien al poderoso sedan sueco, y en instantes es capaz de subir fácilmente a su máximo en las 6000 vueltas en drive normal o manual de primera a quinta, seguramente en sexta también; y ojo que estamos en la época de los autos más rápidos de la historia donde ya es normal tener mínimo 6 cambios y centena y media de caballos superados en 40 por éste carrazo lo que lo hace muy rápido. O no tanto, si lo comparamos con el ”BM” 330, o el Mercedes C250, que lo son aún más……la séptima y octava velocidad están para viajar descansados y alargar la vida útil de motor, caja y transmisión: a 95, se viaja en octava con la máquina a 1600 vueltas…….
¿Sigue siendo Volvo el auto más seguro? Sí, pero no con la notable superioridad de otros tiempos, cuando en ninguna marca estaba disponible lo que hoy sí está en todas. Estructuralmente, además del comportamiento de airbags, cinturones y apoya cabezas según los reconocidos test de Euroncap y de IIHS en los Estados Unidos, en choque frontal y lateral, se comporta en general muy bien, lo que replican BMW serie 3, Mercedes C, y Audi A4.
En cuanto a la resistencia del techo ante volcamiento, curiosamente soporta lo mismo que el reciente serie 3, Audi queda un poco por debajo sin ser mediocre, pero Mercedes supera al sueco y germano por un poco; sencillamente, todos califican con altas notas en las pruebas. Entonces, ¿cuál es la ventaja del Volvo?
Cuando el auto se sale de la vía, despega del piso y cae de manera brusca sobre sus 4 ruedas, donde se manifiestan fuerzas verticales muy poderosas que lesionan gravemente la columna, interviene su exclusivo y patentado sistema run off – road protection (de serie hasta en la pequeña XC40), que tensa el cinturón al detectar el despegue, y amortigua el impacto con un sistema especial muy eficiente incorporado en los cojines delanteros.
Largo capó y paso de rueda ¿Recuerdan el P1800 de El Santo? Foto: Fernando Santos
Como complemento a su tradición de seguridad, igualmente de serie, tiene otro sistema que lo distancia de la competencia y ayuda mucho por ejemplo ante un micro sueño: se denomina asistente de dirección para evitar colisión; se vale de los radares y cámaras que leen las líneas en vías de doble sentido sin separador. Cuando el auto empieza a salirse del carril, y detecta el tráfico que se acerca peligrosamente en sentido contrario, empieza a corregir la dirección; si no puede evitar el golpe, frena lo más que puede para que el impacto no sea tan fuerte.
Para Colombia trae también como equipo estándar: monitoreo de punto ciego (por cierto muy activo), control de velocidad de crucero activo para circular acelerando y frenando por detrás del desgastante tráfico, control parcial automático de la dirección para centrarse en el carril, y frenado autónomo cuando se atraviesan peatones, ciclistas y animales incluso en la noche. Curioso -seguridad Volvo- que en una frenada autónoma, activó los seguros para niños.
Volvo se encuentra en el mejor nivel de su historia. Las carrocerías y sus interiores son muy llamativos, diferentes, y conservan la identidad de marca; la seguridad, en tiempos tan exigentes, se encuentra un escalón arriba y el manejo sin ser tan BMW o AMG de Mercedes, es divertido, seguro y neutro para ser un ”todo adelante” por la tracción delantera.
Las cantidades de sus autos han batido récords en Colombia y el mundo, lo que ha fortalecido en general la red de atención al cliente, y facilita la venta como usados, por lo menos de las camionetas XC60. Esperando que el nuevo S60 se comporte de la misma forma, y para quienes quieren lujo con discreción, no queda más que recomendar la visita a un concesionario de la compañía sueca para corroborar lo descrito en éste artículo.
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CORREO: italianties@yahoo.com
Agradable articulo, claro y ameno de leer, felicitaciones a su autor.
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