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Se celebraron cuatro eventos tecnológicos en las últimas semanas. El último de ellos fue el Google I/O 2012. Semanas atrás, Apple organizó el WWDC y presentó la tecnología Retina MacBook Pro con spiffy iOS 6. Microsoft, por su parte, llevó a cabo dos conferencias: En la primera de ellas presentó su tableta y en la segunda, el Windows Phone 8.
Detengámonos en un llamativo proyecto: Google Glass, las gafas de realidad aumentada, un accesorio que permitirá desplegar información extendida en el campo visual de los usuarios. Con solo apuntar su mirada al cielo conocerá las previsiones del clima; además, podrá programar una cita, compartir fotos o activar una videoconferencia con un leve movimiento de cabeza y enviar imágenes en vivo a un receptor remoto (como un monitor, pantalla LCD o Smartphone). 
¿Ustedes se imaginan, por ejemplo, su impacto en la industria cinematográfica? Un individuo pagaría la boleta y el resto de la familia disfrutaría del estreno desde la comodidad en casa (por medio de una transmisión de video streaming) . No faltará el que se la pase insultando porque el que lleva las gafas mueve la cabeza o estornuda en plena escena romántica.
Imaginen el abanico de posibilidades que ofrece: conciertos, finales de fútbol, las amigas de mis amigas e incluso los exámenes de Estado, vistos desde la perspectiva del testigo directo. Los estudiantes de medicina podrían ver las intervenciones quirúrgicas en vivo.
Google no será el primero en lanzarlas al mercado. Apple patentó el iGlass y se sabe que otras compañías trabajan en tecnologías similares. Este tipo de gafas se conocen como Head Up Displays (gafas de realidad aumentada) en el ámbito científico. 
Entonces a buscar esa alcancía para empezar a ahorrar, ya que tenemos un mundo por ver con responsabilidad.

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