Diplomacia barata e hipocresía política en América Latina
Después del fracaso de Colombia, Venezuela y la indiferencia e hipocresía de un organismo como la OEA, quedó en evidencia no solo el desaire y menosprecio expresado por ciertos países cómplices y seguidores del chavismo y su socialismo del siglo XXI, sino también la pérdida de influencia del mismo en el continente, ya que solo contó con el apoyo de Ecuador, Bolivia, Nicaragua y Haití, así como también se puede deducir la ineficacia e indiferencia frente a la violación de Derechos Humanos por parte del circo de la OEA. (Ver: el juego de la ONU http://www.kienyke.com/kien-bloguea/avances-y-desafios-de-naciones-unidas-onu-sirve-para-algo/)
Una vez más queda claro el papel de los organismos internacionales en el mundo, intereses políticos y económicos por encima de la protección del orden, la paz, la justicia, la defensa de la soberanía, integridad territorial e independencia, como reza por ejemplo, la carta simbólica de la OEA, un papel más en medio de violaciones y ultrajes a lo largo y ancho del continente.
A la misma, se suma el organismo internacional de UNASUR, manipulado por el gobierno de Maduro y sus borregos en Ecuador, Bolivia y Nicaragua, entre otros, donde paradójicamente si quiere Venezuela exponer la problemática fronteriza que se negó a que fuera debatida en la OEA, que en el pasado fue atacada por aquel por ser servil a los intereses de Estados Unidos pero que nuevamente le favorece al gobierno venezolano, como aconteció en las pasadas protestas donde no se logró aprobar una declaración conjunta ante los abusos cometidos. (Ver: http://blogs.eltiempo.com/diagnostico-global/2014/02/20/crisisvenezuela/)
Igualmente, es la Unión de Naciones Suramericanas la que tiene como secretario a un expresidente colombiano, impune y criminal, que ahora se esconde bajo el rebaño chavista hablando de Derechos Humanos y pidiendo diálogo internacional… vaya cinismo del elefante político colombiano, otra apuesta diplomática fracasada de la mermelada santista.
Por otro lado, que puede exigir una dictadura que ahora no solo ataca a sus nacionales sino también a los migrantes colombianos que han sido deportados como animales, por supuestos indicios de contrabando y paramilitarismo, auspiciados por la Guardia Venezolana.
Gobierno capitalista bipolar interno pero socialista en el discurso, atacado por la mayoría del pueblo a través de las vías electorales y políticas pero resistido hasta el momento, que se permite robar elecciones y convertir la justicia en portaminas de bolsillo. (Ver: http://blogs.eltiempo.com/diagnostico-global/2013/04/19/dictaduras-latinoamericanas-gobernadas-por-capitalistas-con-un-mensaje-trasnochado-socialista/)
Además, no solo deportan miles de colombianos sino que ahora salimos a deberles a los incapaces mentales que pertenecen al régimen o circo que gobierna en el vecino país, quienes exigen no solo agradecerles sino compensarlos por los graves perjuicios cometidos en la frontera en razón del contrabando y el paramilitarismo.
Ni la OEA, ni la ONU, ni la Corte Penal Internacional, ni la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, ni ningún otro organism o ente internacional protege los derechos de indefensos, migrantes y ultrajados, una utopía mas en un mundo sin sentido de humanidad que es conducido por los emporios económicos y las elites políticas con abierta licencia para pasar por encima de los Derechos Humanos.
La diplomacia barata de unos, los ideales de guerra de otros y sus intereses políticos y económicos condenaron a Colombia y Venezuela al abismo y al fracaso actual
FORO DE OPINIÓN
¿Qué puede esperar un país secundario como Colombia frente a los anuncios diplomáticos del Presidente Santos contra el estado inviable y dictatorial de Venezuela por sus actos criminales y violatorios de Derechos Humanos?
Posdata 1: La crisis migratoria en Europa evidencia la fragmentación social – política y las consecuencias del abuso de poder de pequeños tiranos que mediante el miedo y el terror logran sostener regímenes durante muchos años. Son precisamente los más indefensos y los débiles, tanto en el viejo continente como en Colombia, los protagonistas de los medios que retratan el dolor y el sufrimiento que sigue cargando millones de migrantes, por lo general, de países explotados mezquinamente por potencias como Estados Unidos, Inglaterra o Rusia.
Falsamente son las mismas naciones que ahora dan la espalda y son indiferentes al ocaso migratorio mundial, generada por sus abusos y atropellos en los países tercemundistas.
Posdata 2: Finalmente, y para colmo de males y justo cuando explotó la crisis en la frontera, la joya de la corona y con el patrocinio del Gobierno y el Congreso de la República, y con el apoyo indirecto de sus electors que se vendieron miserablemente, el salario de los Honorables Parlamentarios ha aumentado 4.66% pasando de 24 millones a 26 millones aproximadamente, respire profundo… se lo que se siente…. (Urgente carta de un congresista al Pueblo Colombiano: http://blogs.eltiempo.com/diagnostico-global/2013/10/08/urgente-carta-de-un-congresista-al-pueblo-colombiano/)
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Los organismo internacionales sólo sirven cuando tienen intereses políticos y económicos en las naciones que acuden a ellos. En Africa y parte de Asia, esos mismos organismos como la ONU, q dicen luchar por la paz y la seguridad, se han quedado quietos y callados, frente a tiranías q por décadas han pisoteado a sus nacionales, apoderándose de países completos en donde los derechos humanos no existen, qué podemos esperar de estos organismos??? En cuanto al gobierno colombiano, ya sabemos q el único tema q realmente le importa y en el cual se esmera al máximo, es proteger y seguir a toda costa con el show de la Habana, el resto no somos más q sapos de quitar y poner.
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ReportarSin duda alguna, la repatriación de algunos colombianos indocumentados que adelanta el gobierno de Venezuela a raíz de un operativo contra grupos paramilitares promovidos por el exdictador Uribe puede ser dramática si sólo nos enfocamos en esa parte de la historia, pero si abordamos el problema de forma global, entenderemos que en Venezuela no hay un operativo contra los colombianos sino contra grupos terroristas que están contrabandeando combustible y otros productos para financiar sus acciones delictivas en ambos lados de la frontera.
En ese sentido, también sería justo que hablar del flagelo de la violencia paramilitar que Colombia está exportando a través de sus fronteras y que afecta a los países vecinos. Pero de lo que más se debería hablar en la actual coyuntura, es de los más de 5.5 millones de colombianos que viven en Venezuela porque se refugiaron en ese país huyendo de la dictadura uribista que los quería masacrar con motosierras y que fueron acogidos con hermandad, generosidad y humanismo.
Pienso que no debemos dejarnos llevar por sensacionalismo mediático del duopolio de RCN y Caracol e informarnos con otros medios, ojalá internacionales para así conocer la verdad y difundirla ampliamente con el fin de no generar odios entre dos pueblos hermanos como lo son Colombia y Venezuela. No seamos amarillistas, no sigamos la corriente con la intención de que una entrada sea popular, contemos la verdad, miremos siempre las dos versiones de los hechos.
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