Iniciativa que rescata el valor y la perseverancia de los colombianos en el exterior
Hace algunos meses Colombia fue testigo de una de las peores catástrofes en el país, más específicamente, en Salgar – Antioquia, donde la mañana del 18 de mayo del presente año, los habitantes del corregimiento La Margarita fueron sorprendidos por el poder de la naturaleza que se llevó no solo ladrillos y cemento sino ilusiones, sueños y esperanzas puestas en estos hogares que entraron en la dolorosa lista de colombianos afectados por la negligencia y la indiferencia estatal.
Pasaron los días y Salgar se convirtió en un recuerdo más dentro de la lista de tragedias que aborta este desangrado país donde las ilusiones rotas siguen destrozando generaciones y condenando a la frustración a muchos colombianos, aunque son pocos los que se resisten ante el panorama hostil en el país y luchan por aportar a la reconstrucción de un país herido y doliente.
Y como parte de esas iniciativas que poco son noticia en los faranduleros y amarillistas medios de comunicación colombianos, un grupo de colombianos en Sídney – Australia decidió organizar un festival en solidaridad con las personas afectadas en esta tragedia, sin gran cantidad de dinero y recursos pero con una motivación y una alegría de poder colaborar desde el otro lado del mundo.
Es así, como días después de lo acontecido, Lucrecia Cardona Vélez, autora intelectual del evento, empezó a convocar a amigos y conocidos para la logística del mismo, buscando recaudar el mayor número de donaciones monetarias o materiales que hicieran posible el evento, quien indudablemente se convirtió en el bastión principal de un evento que motivó a propios y extraños a participar de manera directa o indirecta.
Fue así como el pasado 5 de Julio, se llevó a cabo éste evento que contó con la presencia no solo de miles de colombianos, sino también de un gran número de personas latinas y australianas que disfrutaron un día para compartir en familia donde la variedad de comida, la música, la danza y el folclor fueron la nota especial de este grandioso festival donde más de 100 artistas brindaron su talento a los asistentes y donde se logró recaudar alrededor de 42 millones de pesos que fueron transferidos directamente a la Diócesis de Jericó de la cual hace parte el municipio de Salgar.
Finalmente, es un hecho que bien vale la pena replicar no solo en otros países, donde algunos colombianos se siguen destacando positivamente y silenciosamente, sino también al interior de un país fraccionado por la guerra mediática y verbal que debe rescatar la perseverancia y superación de muchos que todavía soñamos con un país viable y estable.
Artículos mas recientes en el blog:
Comentarios