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¡Mochilero! Esperando que pronto podamos visitar las playas de Colombia, ¿sabía que ver el mar puede activar el chip de la felicidad en su interior? ¡Conozca aquí lo que la ciencia afirma y claro, anote estas playas que le mostraré para tener en la lista de próximos destinos una vez pueda hacerse! ¡Bienvenidos!
No es un secreto que quedarse frente al infinito mar azul, incluso sin necesidad de adentrarse en él, ayuda a relajarse y nos brinda una sensación de bienestar. Pero lo que tal vez no sepa es que este fenómeno tiene un poder científicamente comprobado para favorecer nuestra salud mental.
Más mar = más felicidad
Me puse en la tarea de investigar qué dice la ciencia respecto a esta afirmación y encontré un estudio poderoso. El proyecto británico BlueHealth -reconocido por la Unión Europea- se ha encargado de comprobar la relación entre el mar y la salud mental de las personas. Con más de 90 estudios, han descubierto hallazgos que a decir verdad, me harán pegarme la endeudada para visitar todas las playas de Colombia una vez pueda hacerlo, aquí algunos:
Los sonidos del mar activan un área del cerebro asociada directamente a las emociones, haciendo que la capacidad de bienestar se incremente. Básicamente, entre más tiempo las vibraciones de las olas se adentren en nuestros sentidos, nos vamos a sentir más seguros y sanos.
El cortisol, la hormona que produce el estrés, también reduce sus niveles en el organismo con el ruido de las olas del mar, que tiene patrones de volumen y frecuencia armónicos y relajantes ¿A quienes después de varios meses de trabajo y carga laboral se le has ocurrido viajar a un destino costero? Creo que a muchos, así que puede que el hermoso mar azul nos ayude como antídoto para liberar el estrés.
El sonido generado por el mar puede remitirnos a los ruidos que oíamos cuando estábamos en el vientre de nuestras madres, lo que provocaría un gran impacto emocional inconsciente en lo que se refiere a la protección y la seguridad. Quizás no recordemos ese sonido magistral aún cuando ni siquiera llegábamos al mundo, pero el oleaje intenso del mar y sus olas infinitas pueden recrear nuestras memorias.
El mar es capaz de transmitir calma y sensación de seguridad, ya que su superficie visualmente “plana” emana estabilidad, alejando la preocupación y el estrés causados por la incertidumbre de un ambiente como el de una ciudad ¿Lo hubiera imaginado? Tras del hecho ver el mar nos hace dejar los problemas atrás y concentrarnos en el presente, disfrutando de la mágica sensación que produce el estar frente a la gran joya azul del planeta.
Las olas de los océanos son capaces de regular los niveles de serotonina, sustancia química producida por el organismo asociada a la mejora del humor y la reducción de la ansiedad. Es decir, además de alejar las preocupaciones, ¿el mar activar nuestra hormona de la felicidad? ¡No se diga más!
Apuesto, a que como yo, ¡no conocía estos beneficios de ver el mar! Aunque el Gobierno no ha fijado una fecha específica para la reactivación del sector turístico o apertura de playas, espero estos datos curiosos pero comprobados, junto con estas postales multicolor, lo motiven a planear su próximo viaje, contemplando el oleaje hermoso de nuestras playas.
“Quien lo mira lo ve por vez primera, siempre. Con el asombro que las cosas elementales dejan, las hermosas tardes, la luna, el fuego de una hoguera” – Borges
¡Nos volvemos a leer pronto mochileros!
Leo Carrillo – Travel Blogger at EL TIEMPO
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