No logro identificar cuándo fue la primera vez que lo sentí. Es de esas relaciones que difícilmente recuerdas cómo empezaron, pero jamás te puedes alejar totalmente. “¡No quiero vivir más contigo, ¿es que no lo entiendes?!”, le he dicho más de una vez, pero de nada sirve. Claro, se va por un tiempo pero luego el muy cara dura ¡regresa! Y entonces yo me paralizo, no sé que hacer, es más, no hago nada y ahí viene el problema.

No son pocas las cosas que he tenido que abandonar porque se pega a mi cuerpo como una sombra de media tarde soleada, y entonces mis piernas flaquean, la palidez llega a mi rostro “¡Dios, como me cuesta respirar en esos momentos!… y una vez más, y solo para que se vaya me quedo quieto, inmóvil… con esa sensación de “¡y si lo hubiera hecho, si lo hubiera enfrentado!”.

Pero hoy decidí eso… ¡enfrentarlo!, pero no voy a estar solo no, no, no.  Veo que se acerca ella, Coralina Achiardi, me la recomendó una amiga “ve, anímate, es una gran coach y de seguro podrá apoyarte”.  “Es más joven de lo que pensaba”, fue el primer pensamiento que tuve… “¿será que sí?” … bueno, ¡ya que!, a lo hecho, pecho.

―Joaquín buen día ―y me extendió cortésmente su mano acompañada de una amplia sonrisa. “Llegó la hora”, pensé.

―Coralina gracias por venir

Me preguntó qué quería trabajar en esa sesión “¿trabajar? Yo creí que íbamos a hablar… bueno, ella sabrá que hace” … así que lo único que se me ocurrió fue contarle lo que me estaba pasando y que no sabía por qué no podía terminar esa relación que tantas veces había frustrado mis proyectos.

―¿Y que hace que hayas tomado esa decisión en este momento?

―Porque hay  algo que quiero hacer y no deseo que se interponga más, es que de solo pensarlo nuevamente empiezo a sentir que no puedo seguir adelante.

―¿Podemos hacerlo pasar?

Con firmeza digo “Si”   

Y ahí estaba, lo ví volverse a pegar a mi lado izquierdo, como queriendo empezar a susurrarme cosas.

―Joaquín, ¿cuántas veces se han sentado conversar? ―preguntó Coralina

―Conversar, conversar creo que ninguna, en cuanto llega no puedo pensar sino en abandonar, en no hacer, en no hablar. ―ni siquiera lo miraba, era claro que me sentía muy incómodo

―Entonces, te invito a que le preguntes cómo está

Lo hice …  escucho… me dice que está calmado. Y después le hice más preguntas. Me dice que siempre ha querido protegerme, como aquella vez en la que mi seguridad pudo verse afectada cuando quise subir a esa montaña rusa para no quedar mal con el grupo de amigos que iba sabiendo que tengo problemas con mi corazón, o como cuando esa noche me fui de copas y llevé el auto. “si no fuera por mí no le habrías hecho caso a tu amigo cuando te dijo que mejor no manejaras, te fueras en taxi y lo volvieras a recoger al día siguiente”, me echó en cara. «Si no fueras por mí no habrías cruzado la acera ese día que esos dos hombres que si bien parecían normales y venían de frente, por la noche viste en las noticias que agredieron y robaron a otra persona que se encontraron más adelante«.. lo volvió a hacer, me lo echó en cara

―¡Claro ―le interrumpí―  y ahora resulta que te salgo a deber! Te recuerdo que si no hubiera sido por ti, me hubiera atrevido a pedir ese aumento que merecía, si no hubiera sido por ti habría invertido en ese negocio que hoy en día es un éxito total, si no hubiera sido por ti le habría pedido matrimonio a…. ―mi voz se quebró en ese momento y callé

―Joaquín ―intervino Coralina― ¿qué es lo que escuchas que te acaba de decir?

Respiré y volví a recordar sus palabras… “que me quería proteger”

―De que te quería proteger en esas cosas que recuerdas hubieras podido hacer

Pensé por un momento

―Supongo que pensaba que si pedía el aumento me iba a doler si me decían que no, o que si invertía en algo que parecía riesgoso iba a quedarme sin los ahorros de mi vida o si le pedía matrimonio a… me volverían a herir…

―Entonces ¿quería hacerte daño?

―No

―Si él solo ha aparecido para advertirte estas cosas, para cuidarte ¿Qué hizo entonces que tomaras esas decisiones?

Silencio… silencio…Silencio… silencio…Silencio… silencio…Silencio… silencio…Silencio… silencio…

―Que no estaba lo suficientemente seguro de mi mismo… que no hice nada más para asegurarme que ese riesgo lo podía tomar… que en realidad no estaba preparado para formar un hogar… que le eché la culpa de las decisiones que en realidad no quise asumir… y ahora que caigo en cuenta,  si no hubiera estado en algunas otras ocasiones la hubiera embarrado…

―¿Cómo lo vas a escuchar a partir de ahora entonces?

―Con cuidado. Le voy a preguntar de qué me está cuidando, no le voy a huir sino a escucharlo para así saber qué me hace falta para estar más seguro o si de verdad estoy lanzándome al despeñadero.

En ese momento me pide que lo despida, así que simplemente primero le agradezco a mi MIEDO el estar conmigo, ahora ya lo entiendo mejor y no me va a paralizar sino a alertar, no puedo seguir culpándolo por no tomar decisiones. Ahora sí, ¡me arriesgo a seguir esta relación!… agradezco a Coralina y me voy de allí feliz… tengo mucho en que pensar.

 

NOTA DE CORALINA. Qué bueno que Joaquín haya decidido trabajar su relación con el miedo. Las emociones nos predisponen a la acción y entender para qué aparecen es fundamental.

El miedo nos previene de peligros y debemos examinar cuales son para prepararnos

. El riesgo de no hacerlo es que se quede a vivir como un estado de ánimo, porque si eso pasa entonces veremos al mundo siempre desde el temor, “no sé a qué le tengo miedo, pero tengo miedo, el mundo es peligroso y eso puede cerrarme posibilidades en la vida”. Si logramos entender la presencia de esta emoción y su interpretación podemos ver posibilidades donde antes solo vehíamos peligro.

¿Qué estás dejando de hacer por miedo? ¿Si conversaras con esa emoción, qué te podría decir?¿De qué te está protegiendo?¿Cómo puedes prepararte para dar el paso?

*Todos los nombres de este relato son ficticios, aunque la situación en si misma, que se desarrolla en una sesión de coaching individual no

Conversemos sobre lo que  podemos apoyar a su empresa, equipo, comunidad o a usted en  coach@coachsandramateus.com / Todos nuestros programas de coaching y formación en www.facilitarclic.com


Avisos parroquiales

Capacitaciones y procesos para empresas a través de juegos bajo metodología Pitágoras. Procesos de coaching ejecutivo e individual. Capacitaciones empresariales a través de juegos y técnicas de conversación desde el coaching. Procesos de coaching ejecutivo y equipos, modalidad de «shadow coaching» (coach en la sombra) y más técnicas que me permiten apoyar a líderes y a equipos a lograr mejores resultados.

¿Busca una capacitación diferente para sus equipos? Gracias a la alianza entre Colman, líderes en el país en la fabricación de botes y otros productos inflables,  y Facilitar CLIC desarrollamos una experiencia náutica  poderosa para la formación en competencias como liderazgo, comunicación, resolución de conflictos, entre otras. Informes en www.facilitarclic.com

Únete al grupo en Facebook Gimnasia Conversacional Este es un grupo que le da la bienvenida a quienes estén siempre inquietos por mejorar su calidad de vida, relaciones y resultados; quienes son líderes de equipos y quieran adquirir competencias para la comunicación efectiva; quienes quieran con sus conversaciones hacer de este, un mundo mejor, desde el rol que ocupan en la vida de quienes les rodean.

Nuevo ebook en Amazon: Mi VIDA, una MARCA con PROPOSITO: Cómo acercarnos a nuestro Proposito de vida y conectarlo con la construcción de nuestra marca personal


Recibe las actualizaciones de mi blog suscribiéndote con tu mail

[subscribe-by-email-form autopt=»true»]


OTROS E- BOOKS

Otras entradas recientes