Hace un tiempo hablaba yo aquí del español como «una lengua imparable», un idioma que no deja de avanzar y de renovarse pese al talibanismo gramatical de unos pocos y la lentitud tortuguesca de la Real Academia Española. Eso lo decía a cuenta del empleo cada vez más...
Dice el dicho que ancha es Castilla, territorio donde nació nuestro idioma, pero lo cierto es que más anchos son Perú, Argentina, Venezuela, Colombia y Bolivia, por ejemplo. Y qué decir de la longitud: la América hispanohablante se estira más allá de México por el norte y le hace cosquillitas a la Antártida por el […]