Publicado en:
Whatever Gastronomy
Mi mamá, como muchas mujeres, nació con ese instinto, esa magia natural que ni los mejores chefs tienen en la cocina. Pero cuando estaba pequeño ella tenía la manía de incluir ullucos en el mercado y, claro, mi hermano y yo, indefensos, de carnitas tiernas, no podíamos...
Continuar leyendo