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Suave y Profundo
De mojigato no tengo un pelo. Soy malpensado, mal hablado, me gusta el sexo y además, soy calvo. De espantos me curé hace tiempo y creo tener la mente lo suficientemente abierta, como para no escandalizarme con nada. Como sea, mi protesta no es moral, sino más bien un poco de tristeza profesional. A Soho, […]
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