Publicado en:
Suave y Profundo
Odio el día que superaste el miedo a crecer. Aún recuerdo tus lágrimas porque te negabas a aceptar que en algún momento ibas a dejar de ser una niña tierna y consentida. Aunque me reía de ti, en el fondo me estaba riendo de mí, porque debo aceptarlo, mucho tiempo después, que era yo el […]
Continuar leyendo