El país joven tiene un problema: Le hace falta sensatez. Los jóvenes solemos ser más apasionados, fervorosos y con mucha energía para la indignación. Eso está bien y es un buen indicador del interés en la realidad política para medir el inconformismo y la voluntad de...
Ni de lejos he tenido que padecer las afugias de estudiar en una universidad pública. Tampoco mis hijas. Por razones de la vida, tuvimos la posibilidad- o la desventura, según como se vea- de estudiar en una universidad privada. Mucho menos viví la tempestad del Mayo...