Al este del Muro de Berlín la protesta no era un derecho legítimo. Según su presidente si los ciudadanos eran “desinteresados, persistentes y fieles a las ideas de la patria”, nadie tendría de qué quejarse, la crítica era indicio de traición. Este mes el mundo celebra...
Los recuerdos de quienes se tomaron las calles de Berlín en 1989 revelan el mismo germen del malestar social que hoy incita a la protesta en otros lugares del planeta.