Terminó el Tour de Francia con una lección para todos nosotros: debemos aprender a convivir con personajes ofensivos que prefieren menospreciar antes que reconocer los grandes esfuerzos de nuestros compatriotas.
Si alguien me hubiera dicho hace algunos años que, en un domingo cualquiera de 2016 como el que acabó de pasar, iba a poder empalagar mi impaciente afición ciclística con victorias de pedalistas colombianos en dos grandes competencias europeas –Nairo Quintana en la Route du Sud y Miguel Ángel López en el Tour de Suisse–, […]