Había oído de Fulanitos y alguna que otra leyenda gastrourbana, así que aproveché la visita de una amiga de Costa Rica a nuestra Bogotá para hacer el obligado recorrido turístico y cultural por el Centro y acabar almorzando en Fulanitos de la Candelaria. Si bien la...
Mi papá es más tulueño que la chuleta con Popular. Ni siquiera le gusta ir a Cali y Bogotá lo enferma. Por eso, porque de su pueblo no sale, el viejo no acepta otros sabores que no sean los suyos y el tiempo lo ha convertido en un fundamentalista defensor de la gastronomía...