La gracia de pedir una chuleta a domicilio es que cuando se abra la caja -pequeña casi siempre- de esta se desdoble un pedazo tan grande que pueda alimentar a toda una familia. Lo increíble de esta fenomenal costumbre vallecaucana es que debajo de esa enorme sábana de carne de(...)
![Profile image](http://blogs.eltiempo.com/wp-content/uploads/sites/469/2014/06/avatar-eltiempo-100x100.png)